La provincia se hace payoya

Expectativas cumplidas. Unas 8.000 personas, según los organizadores, pasaron ayer por la carpa que se ha montado en la zona de la Albarrada de Villaluenga del Rosario para disfrutar de la III Feria del Queso Artesanal de la Sierra de Cádiz, un evento que se consolida como una de las ferias gastronómicas más importantes de la provincia y que ha vuelto a convertir a la pequeña localidad serrana en la capital quesera de Andalucía por unos días.

Los visitantes llegaban ayer a la Feria embaucados por la belleza del entorno en el que se celebra, el aroma de los productos que allí se muestran ayudaba a abrir el apetito y los sabores terminaban conquistando el paladar de los amantes de los quesos. A pocos metros de la Feria, en los terrenos donde un día Alejandro Sanz estacionó el 'Tren de los Sueños', las protagonistas de esta celebración, las cabras payoyas y las ovejas merinas de Grazalema, pastaban ajenas de la expectación que levantan los productos que se elaboran con su leche.

De todos los rincones de la provincia provenían unos visitantes que en pocos pasos probaban los quesos artesanales más reconocidos de Andalucía. Los puestos de las queserías de la provincia, Payoyo, La Velada, La Oliva, La Cabra Verde, El Gazul, El Bosqueño, Sierra de Grazalema, Montealva, Sierra de Ubrique, Pajarete e Industrial Agropecuaria Zahara, fueron de los más visitados de la muestra.

Alberto y María llegaron a la Feria desde Jerez para «poder disfrutar de los mejores quesos que conocemos». Ellos llevaron en el coche hasta el perro porque «vamos a aprovechar para disfrutar de este magnífico entorno, por lo que pasaremos el día en la Sierra». Los restaurantes del entorno se llenaron ayer de visitantes y los merenderos de la zona se convirtieron en grandes patios de colegio donde los pequeños jugaban mientras las familias disfrutaban de un día de campo.

La tercera edición de la Feria del Queso se planteaba con cierta incertidumbre tanto para los organizadores como para los expositores, al celebrarse por primera vez en un fin de semana normal, ya que las ediciones anteriores coincidieron con un puente y con la Semana Santa. No obstante, la afluencia de público que se consiguió ayer fue la que se deseaba y para hoy se esperan que se acerquen a la Feria unas 10.000 personas, alcanzando los 18.000 visitantes previstos.

Los expositores destacaron la importancia de este evento aunque algunos aseguraban que «en ventas estaremos mucho más bajos que en años anteriores porque se nota que se mueve menos dinero», reconoció Francisco Barea de Quesos La Velada.

Para algunas queserías de la comarca serrana su presencia en la Feria está siendo casi su presentación oficial en sociedad. Ese fue el caso de Quesos Sierra de Ubrique y la quesería de Zahara de la Sierra, así como la jerezana Montealva.