El ex tesorero del PP Luis Bárcenas, el pasado mes de abril. :: EFE
ESPAÑA

'Gürtel' usó 50 firmas para desfalcar decenas de millones en doce años

El levantamiento del secreto del sumario revela que Correa y Bárcenas intentaron burlar el bloqueo judicial de sus fondos en Suiza

MADRID. Actualizado: Guardar
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El nuevo levantamiento del secreto del 'caso Gürtel' ordenado ayer, que afecta a unas 30.000 páginas, revela la magnitud del millonario desfalco de Francisco Correa y los suyos durante más de una década gracias a una madeja societaria de cerca de medio centenar de mercantiles opacas. Una cantidad -decenas de millones de euros, según apuntan las comisiones rogatorias- que la Policía Judicial ni siquiera se atreve a precisar aún. El fin del velo judicial también dejó al descubierto las recientísimas maniobras del ex tesorero del PP Luis Bárcenas por intentar burlar el bloqueo de sus fondos en Suiza o las fantasías del propio Correa, que pensó ser capaz de frenar a Baltasar Garzón.

Paraísos

La trama 'Gürtel' usó más de medio centenar de empresas en veinte países diferentes para opacar sus desfalcos millonarios, que comenzaron en septiembre de 1997. Así lo asegura el vasto informe R-08, de 155 páginas y fechado el pasado septiembre, que es hasta el momento el más exhaustivo análisis de la Policía sobre la maraña societaria creada por los dos supuestos 'cerebros' internacionales de la red, Luis de Miguel y Ramón Blanco Balín, con base en los paraísos fiscales de ex colonias británicas y holandesas. A pesar de tener en su poder la contestación de una decena de países sobre los movimientos, los técnicos se ven incapaces de cifrar aún cuánto dinero 'negro' se llevaron Correa y los suyos al extranjero, que se estima en varias decenas de millones de euros. Sí hay una valoración de cuánto dinero 'reintegraron' ya lavado al sistema monetario español: más de 5,4 millones de euros, que fueron inyectados a sus empresas españolas a través de las dos grandes mercantiles dedicadas al fraude: Pacsa y Rustfield.

14 millones por favores

Un pormenorizado informe de Hacienda de julio de 2009 revela que Correa, sólo entre los años 2002 y 2004, recibió como pago a sus favores e intermediaciones más de 14 millones de euros de empresarios y «desconocidos». Ni un solo euro de esa cantidad fue declarado al fisco y solo 6,4 millones llegaron a ingresarse en el banco. Los más de 7,6 millones restantes, cree Hacienda, fueron enviados directamente al extranjero para su lavado y posterior 'reutilización', de vuelta a España, en pagos y sobornos a autoridades públicas.

¿Dinero al partido?

Ese mismo atestado de Hacienda considera probado que el PP de Valencia, «o alguien integrante de esta agrupación», recibió de la caja de 'Gürtel' 420.000 euros en efectivo en diciembre de 2002. La Agencia Tributaria, en el mismo apartado reservado a «agrupaciones políticas», también apunta «hipotéticamente» a «Castilla y León/Segovia» con un pago de 144.200 euros.

Suiza: Bárcenas y Correa

Las autoridades helvéticas informaron en febrero que Luis Bárcenas solicitó una tarjeta de crédito con un límite mensual de 25.000 euros contra una cuenta hasta entonces desconocida en Suiza. La conclusión de la Policía Judicial es tajante: el ex senador del PP quiere «trasvasar dichos capitales a otro lugar y de esta forma dificultar la investigación sobre su patrimonio». El banco helvético le denegó la petición por estar Bárcenas incurso en una investigación fiscal en España. A la vista de los papeles conocidos ayer, Bárcenas no es el único que intenta 'salvar' algo de su patrimonio en Suiza. El propio Correa, en mayo de 2009, desde la cárcel, contactó con el despacho de abogados 'Fontan et Associés' para tratar de evitar el bloqueo de sus fondos en entidades de Ginebra.

Vivía en el PP

Bárcenas, en su declaración ante el Tribunal Supremo cuando aún era aforado, tuvo que reconocer que mantenía una relación cuanto menos «cordial» con Francisco Correa y todavía más «especial» con el número dos de la trama, Pablo Crespo. Afirmó que «Correa pasaba más tiempo dentro del partido que en su propia empresa» porque era «proveedor en exclusiva del PP en la organización de eventos». El ex senador, en su interrogatorio, apuntó que las siglas L.B. en los libros de contabilidad de la trama se refieren a un empresario desconocido llamado Lucas Bagchus.

Una fortuna en joyas

No solo coches o trajes. Joyas, muchas joyas. La trama 'Gürtel' se gastó en unos cuatro años 143.861 euros en una de las más selectas joyerías de Madrid, Suárez, en compras, casi siempre en metálico, con las que supuestamente agasajar a políticos y empresarios. Según un informe de la Policía Judicial, que interrogó al director del establecimiento, a veces era el propio Correa el que se gastaba 6.000 euros en una sola tacada y otras era el contable de la red, José Luis Izquierdo. Las joyas eran facturadas a nombre de varias empresas, entre ellas las dos mercantiles que más trato tuvieron con los altos cargos del PP en Madrid y Valencia, Special Events y Orange Market.

'El rey Baltar' y Botín

Correa se creía intocable, según los nuevos pinchazos que han visto la luz. En una de esas llamadas, un día antes de su detención en febrero de 2009, su abogado Juan Pérez le tranquilizó ante los rumores que apuntaban a que Garzón iba a ordenar su detención. El letrado le aseguró que el juez no iría por él porque el «Rey Baltar» tenía un «compromiso» con el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, y si investigaba sobre Boadilla iba a terminar por «salir lo de la Ciudad del Santander». «El primero que va a decir que marcha atrás es Botín», garantizó Pérez, y Correa le creyó. El abogado se refería veladamente al patrocinio del banco de los polémicos cursos de Garzón en Nueva York, por los que está imputado en el Supremo.

Agag y Aznar

De las conversaciones con Pérez Mora desclasificadas hay otra parte curiosa. En enero de 2009, 'Don Vito' le dijo a su abogado que estaba convencido de que la investigación contra él, en realidad, era para «cazar» a José Maria Aznar y a su yerno, Alejandro Agag. Correa, citando a «amigos» en la Policía, afirma que estos «dicen que van a por Agag y Agag no tiene nada que ver con ese... con esa ciudad ni nada, nada... pobre hombre. Lo que pasa es que la gente que quiere una redecilla (sic) política, que quiere joder al alcalde (...) y me ha metido a mí por el medio como que yo soy amigo de Alejandro, y que a lo mejor a través mío cazan a Alejandro y a Aznar... una historia que no hay quien se la crea, cuando nunca hemos tenido relación con ellos».

«Camps es un jeta»

En las conversaciones hay otra anécdota que ilustra la situación de la trama en la Comunidad Valenciana. Álvaro Pérez, 'El Bigotes', el hombre de la red en Valencia, se jactaba de ser amigo íntimo del 'president', pero no dudaba en descalificarle a sus espaldas. En una charla telefónica con Ricardo Costa tilda al jefe del Ejecutivo autonómico de «jeta». 'El Bigotes' también refiere una supuesta deuda de 50.000 euros de Carlos Fabra, presidente de la Diputación de Castellón, que no consigue que le pague.

Marta del Castillo

La Fiscalía utilizó un auto del caso de Marta del Castillo para defender la legalidad de las escuchas carcelarias dictadas por Baltasar Garzón y que le han valido su imputación ante el Supremo por prevaricación. El Ministerio Público hizo un paralelismo entre la decisión del ex magistrado de 'Gürtel' y la orden del juez que investiga la desaparición de la joven sevillana para que fueran intervenidas todas las comunicaciones en prisión de tres de los imputados a fin de saber dónde se encuentra el cadáver de la chica.

Imputaciones dudosas

El juez Antonio Pedreira quiere levantar la imputación por falta de pruebas a siete de los acusados y ha pedido su opinión a Anticorrupción. Se trata de Arturo Gianfranco Fassana, el gestor internacional de la trama; del padre y del hermano del ex eurodiputado Gerardo Galeote; del empresario Gonzalo Naranjo; y de los abogados Santiago Lago Bornstein, Manuel Delgado y José Antonio López Rubal. Estos dos últimos eran los letrados originarios de Correa y Crespo, pero abandonaron su defensa cuando, a su vez, fueron imputados.