Opinion

Muchos cuernos

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Cultura al cubo. Vacié una mini-botella de cava Freixenet que tenía guardada desde mi noche de bodas, disfruté como un niño renacido la precuela de Star Trek de Abrams y bendije mi baño leyendo una recopilación de artículos de APR que me regaló MMA antes de irse a la puta A. Vino, Cine, Lectura. No me hacían falta para sacar de mi interior un poquito de mala uva pero a veces hay que darse un gusto. Como el que me voy a dar ahora mismito: hoy vamos a hablar de cuernos. Pero no de los pertenecientes a los cornudos que pululan por las sobremesas sino al cuerno hispánico, Astados Sin Fronteras, al toro y la tora y a la Asociación de Memoria Histórica de Manolete: Sin Islero no hubiera habido corná. Cuando sube el gasoil y volvemos a pensar qué haremos cuando no sepamos qué hacer con la hipoteca un chasquido nos hace girar el cuello y mirar al lado contrario. A nadie le importa, dos semanas después, el Estatut, porque ahora nos mientan la Monumental de Barcelona (antigua Plaza de El Sport). Respiran, pues, los políticos catalanes. Las imágenes de la votación mostraron parlamentarios brincando como si Iniesta hubiera marcado de nuevo (ironía) mientras otros lloraban como Van Bommel (cinismo). El muy honorable -dicen- Montilla manifiesta que está a favor de las corridas de toros en Cataluña pero que hay que respetar al Parlament. Respetemos, respetemos. ¿Y a la Constitución? ¿La respetamos también? Pero, ¡Vive Dios! (laicamente hablando), ¿cómo puede pensar el resto del Estado español (o sea, España) que la eliminación de las barretinas tiene un nacionalista sentido oculto? Es por los animalitos, sufrimos porque sufren. ¿Quién se acuerda de la madre del toro? Y, si nos ponemos serios, el toro de Osborne destruye la imagen del medio ambiente rural; el de «la roja» en medio de la bandera oficial es poco republicano, centralista y fascistoide. Y, además, es un símbolo fálico y machista: La leche la da la vaca y, si se ríe, el quesito, ergo ¿por qué no hay corridas de vacas? Van por nuestros símbolos nacionales: Raúl extraditado a la Bundesliga, Enrique Ponce imputado por delito de maltrato animal y próximamente prohibirán la tortilla de patatas y el Paquito chocolatero. Pero no es por nuestro nacionalismo, anda ya, dice una de ERC. Si es que sois malpensados. Es que nos preocupa. La sociedad catalana no progresa por la tauromaquia que tiene la culpa del paro. Derribando plazas de toros salen muchas VPO (la pela es la pela). En fin, lo que yo decía: que hay mucho toro suelto. Y muchos cuernos. Más que en la edición de lujo de Cossío.