El Ibex retiene los 11.000 puntos tras dos días de caídas

Sesión de descensos generalizados en los mercados de renta variable europeos. La recogida de beneficios se ha intensificado en Europa. El peor fue el PSI-20 de Lisboa, con un descenso del 1,70%. A continuación se colocó el Ftse Mib de Milán, que retrocedió un 1,24%. El Cac 40 francés, por su parte, se dejó un 0,87%. El Dax alemán, un 0,79%. En este contexto, uno de los que mejor se comportó fue el Ibex-35, que registró un descenso del 0,70%, para mantenerse por encima de los 11.000 puntos. Dio un último cambio en los 11.074,90 puntos, un poco por encima de los niveles mínimos de la jornada, que se colocó en los 11.074,67 puntos. El Ftse 100 británico terminó la sesión con un recorte de alrededor de medio punto porcentual.

Wall Street también comenzaba la sesión con descensos. Una de las posibles razones tuvo que ver con las nuevas previsiones de crecimiento publicadas por el Banco Mundial. Rebajó las previsiones para Estados Unidos, China y Rusia y, por tanto, también para el crecimiento global desde el 3,2% hasta el 2,8%.

Una revisión a la baja del crecimiento mundial que echa más leña al fuego del temor existente entre los inversores de que las subidas hayan ido demasiado lejos, de que se estén forzando demasiado las valoraciones.

En la agenda económica de la sesión, pocas referencias, a excepción de la tasa de paro del Reino Unido del mes de abril, que se situó en el 6,6%, una décima por debajo de lo esperado. En España, el indicador más importante vino de la mano de las transacciones de viviendas, que crecieron un 5,3% en abril, después de haberse recuperado un 22,8% en el mes anterior.

En la sesión del jueves habrá referencias de mayor calado, como el informe mensual del Banco Central Europeo, aunque su relevancia habrá pasado a un segundo plano después de que su presidente, Mario Draghi, haya adoptado ya medidas de atajar la posible deriva deflacionista. También importante será la publicación del índice de producción industrial del mes de abril, que se prevé haya aumentado un 0,9% interanual. Y en Estados Unidos, las ventas minoristas adelantadas del mes de mayo.

Sólo seis valores en positivo

En el selectivo español, apenas media docena de valores terminaron la sesión en positivo. El mejor fue Inditex, con una revalorización del 1,13%, después de presentar sus cuentas de su primer trimestre fiscal y de anunciar un “split” en sus acciones de cinco por uno. Batió las expectativas de los analistas, pese a registrar la mayor caída del beneficio para un primer trimestre desde 2009.

A continuación, Viscofán, que se apuntó un 0,72%. El avance de Técnicas Reunidas fue de cerca de medio punto porcentual. Enagás, Acciona y Gas Natural completaron la lista de valores en positivo.

En negativo, IAG fue el peor, con un recorte del 2,80%. Posiblemente se vio afectado por el comunicado publicado por su rival Lufthansa, según el que recorta drásticamente su previsión de beneficio tanto para este año como para el siguiente. De hecho, la compañía alemana retrocedía en Bolsa un 14%. A continuación, Popular y Bankia, que sufrieron caídas de un 2,71% y un 2,39%, respectivamente. También caídas de más de dos puntos porcentuales para Sacyr, Gamesa y FCC. Otro buen puñado de valores cedió más de un punto porcentual: BME, el Sabadell, Bankinter, Jazztel, Indra, Mediaset, BBVA, Grifols, OHL; Amadeus y CaixaBank. Como vemos, fue un mal día para el sector financiero español.

En el Índice General de la Bolsa de Madrid, el mejor, Azkoyen, que se apuntó un 2,38%, mientras que Bodegas Riojanas y Cie Automotive ganaron más de un punto porcentual. Éstos fueron los únicos valores más rentables que Inditex.

En el otro lado de la tabla, Tubos Reunidos y Urbas fueron los peores valores de la sesión, con recortes de más de un 5%. Tubacex perdió más de un 4% y Atresmedia, más de un 3%.

Leve subida de la prima de riesgo

En el mercado de deuda, leve subida de la prima de riesgo de la deuda española, que se amplió desde los 123 hasta los 124 puntos básicos. La prima de riesgo de Italia se mantuvo en los 139 puntos básicos. La rentabilidad del bono español a diez años subió, pero muy levemente, hasta el 2,65%. La del bono italiano, hasta el 2,80%. La del bono alemán a ese mismo plazo, se mantuvo estable en el 1,41%.

El Tesoro no pierde la oportunidad de aprovechar la caída de las rentabilidades de la deuda española y ayer realizó una emisión sindicada de deuda a diez años en una semana en la que el Tesoro no tenía planeada ninguna emisión. Además, el instituto emisor también ha lanzado una propuesta para canjear tres emisiones de bonos con vencimiento en 2015 por otros con vencimiento a mayor plazo, en concreto, por títulos a diez años.

El tipo de cambio entre el euro y el dólar se mantuvo prácticamente estable en el nivel de 1,3535 unidades.