Sarkozy, en las pasadas elecciones francesas. / Benoit Tessier (Reuters)
SEGÚN 'LE MONDE'

Sarkozy recurrió al contraespionaje tras las pesquisas de su relación con Gadafi

El expresidente galo intentó averiguar con un alto cargo de la Inteligencia gala si estaban realizando una investigación sobre una posible financiación ilegal de su partido

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El expresidente francés Nicolas Sarkozy contactó en junio y enero pasados con el jefe del contraespionaje para informarse de las investigaciones sobre las sospechas de que había recibido dinero del derrocado líder libio Muamar el Gadafi para su campaña electoral de 2007, informó hoy 'Le Monde'. Sarkozy intentó verificar con el responsable de la Dirección Central de Información Interior (DCRI), Patrick Calvar, si sus servicios estaban haciendo pesquisas sobre una presunta financiación ilegal por Gadafi de su candidatura, señaló el diario sin precisar sus fuentes.

'Le Monde' indicó que los magistrados instructores Serge Tournaire y René Grouman interrogaron como testigo a Calvar sobre las llamadas del anterior jefe del Estado el pasado 28 de marzo y que éste les aseguró que no le reveló ninguna información, amparándose en que son asuntos cubiertos por el secreto oficial. En una de esas conversaciones, objeto de escuchas judiciales, Sarkozy se mostró preocupado por la eventualidad de que declare el que durante mucho tiempo fue el intérprete del depuesto líder libio, Mofta Missuri, ya que podría dejarlo en mal lugar.

Missuri, entrevistado para un programa de la televisión pública francesa 'France 2' en junio pasado, confirmó que hubo un pago oculto de 50 millones de dólares a la campaña de Sarkozy y que ese tipo de operaciones se hacían con maletas de billetes, no con transferencias bancarias o cheques, para no dejar rastro. Los jueces Tournaire y Grouman -siempre según 'Le Monde'- están cada vez más convencidos de que Sarkozy y su entorno tienen informadores en puntos estratégicos del aparato del Estado.

Entre esas fuentes figura el magistrado Gilbert Azibert, que se informaba con consejeros del Tribunal Supremo sobre la marcha de la instrucción sobre si el expresidente había recibido dinero para su campaña de 2007 de la millonaria Liliane Bettencourt. Varios de esos consejeros del Supremo han tenido que pasar por el despacho de los jueces instructores para tratar de clarificar las cosas.