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Una anciana no llama a los bomberos «por no molestar»

Peleó desde las cuatro de la mañana contra el fuego declarado en su casa, pero a las 9.30 horas los bomberos acudieron porque les avisó la conserje del edificio

ALICANTE Actualizado: Guardar
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La madrugada fue larga en uno de los áticos de la calle San Fernando, en Alicante. La inquilina del séptimo piso del número 27 de la céntrica calle de la capital pasó desde las cuatro de la madrugada hasta las nueve y media de la mañana intentando extinguir un pequeño fuego producido, al parecer, por la manta eléctrica con la que se tapaba. Todos sus esfuerzos por sofocarlo fueron en vano pese a que en algún momento creyó que había ganado la batalla a las llamas. Tuvieron que ser los bomberos quienes extinguieran finalmente con el fuego sobre las diez de la mañana, pues la afectada no llamó con anterioridad "por no molestar", según señalaron fuentes de los servicios de emergencia.

Todo comenzó a las cuatro de la madrugada cuando la mujer, de 71 años, notó un intenso calor que salía de la manta. De inmediato procedió a mojar ropa de cama para sofocar las llamas y por un momento creyó que había puesto fin al conato de incendio, por lo se fue a dormir a otra de las habitaciones. Sin embargo, a las 5.30 horas volvió a notar olor a humo procedente de la estancia. Las llamas habían rebrotado, pero lejos de alertar a los bomberos trató sin éxito de sofocarlas hasta que llegó la conserje del inmueble, quien trató de ayudarla. No sería hasta pasadas las nueve de la mañana cuando al final la empleada dio la voz de alarma.

Cuatro dotaciones de Bomberos del Parque Municipal de Alicante, tres de la calle Italia y otra de la prolongación de Alfonso X El Sabio, acudieron de inmediato, aunque solo fue necesario emplear una manguera del propio inmueble para extinguir por completo las llamas. Asimismo, Policía Nacional y Local, junto con una ambulancia de Soporte Vital Básico (SVB), acudieron para atender a la mujer, quien había pasado muchas horas inhalando el humo que desprendía el colchón. Pese a no ser una gran cantidad, "es un humo muy tóxico", informaron fuentes del operativo.

Los bomberos desplegaron una línea de extinción hasta el ático, así como el protocolo habitual para evitar que se propagase a otros inmuebles colindantes, aunque no fue necesario por la leve intensidad del fuego. Afortunadamente todo quedó en un susto.

La afectada fue trasladada al centro hospitalario para ser tratada ante una posible intoxicación por inhalación de humo, si bien pudo salir del domicilio por su propio pie cerca de las diez de la mañana, cuando los servicios de emergencias iniciaron la retirada del lugar.

En estos días, con la llegada del frío invernal, es cuando este tipo de sucesos tienden a producirse más a menudo. El uso de braseros, estufas, mantas eléctricas y todo tipo de sistemas de calefacción elevan el riesgo de incendio. Además, el mayor uso de elementos eléctricos provoca sobrecargas e la red eléctrica que derivan en fuegos.

Por ello, las autoridades recomiendan extremar las precauciones y no dejar desatendidos estos aparatos y llevar cuidado con el uso excesivo de aparatos eléctricos para no sobrecargar la red, tal y como destacan expertos en la lucha contra este tipo de emergencias.