El gran legado de Elías Querejeta

Era un futbolista consagrado en la Real Sociedad, equipo con el que jugó cinco años en Primera División, pero un encuentro con Eduardo Chillida le cambió la vida y le llevó a realizar la que desde niño era su gran pasión: el cine. Así pues, desde esas palabras con el gran escultor vasco colgó las botas y comenzó una carrera cinematográfica que le ha llevado a lo más alto y a ganarse el respeto de todos, con más de cincuenta películas a sus espaldas.

Se inició en los cortometrajes junto a Antonio Ezeiza y grabó 'A través de San Sebastián' (1961), un intento ambicioso que cambió la estructura fija de los documentales realizados entonces en España, y 'A través del fútbol' (1963), prohibido por la censura por su contenido político reflejado a través de acontecimientos futbolísticos que arrancan con la primera Copa de España que se celebró en Madrid en 1902 para conmemorar la coronación de Alfonso XIII.

La dirección no le llenó y decidió que quería dedicarse a la producción: así fue como creó su propia empresa en 1963. Su gran oportunidad se la dio 'La caza', película dirigida por Carlos Saura, autor con el que inició un idilio que duró hasta hasta 1981 y dio obras como 'Pepermint frappé' (1966) o 'La madriguera' (1969), y las últimas 'Elisa vida mía' (1977), 'Mamá cumple cien años' (1979) y 'Deprisa, deprisa' (1980).

Su carrera está ligada a la de los grandes directores del cine español: asoció su nombre a Víctor Erice, con 'El espíritu de la colmena' (1973) y 'El Sur' (1983): Jaime Chávarri; Montxo Armendáriz, 'Tasio' (1983) y '27 horas' (1986); Fernando León de Aranoa, con 'Barrio' y su reconocida cinta 'Los lunes al sol'; Manuel Gutiérrez Aragón, 'Habla, mudita' (1973); o Julio Médem, entre otros.

Los últimos trabajos que realizó han sido 'Siete mesas de billar francés' (2007), dirigida por su hija Gracia y con la que ha colaborado en multitud de ocasiones, y 'Cerca de tus ojos' (2009), que supuso también su debut como director cinematográfico.