Se acabó la fiesta de los 7.200

Los mercados han optado por la prudencia y, sobre todo, por recoger unos cuantiosos beneficios después de tres jornadas al alza en las que el Ibex 35 había registrado unas ganancias superiores al 12%; y tras diez sesiones en las que la revalorización superó el 20%. Con estos registros, característicos de otras etapas alcistas pero completamente justificados ahora por la volatilidad coyuntural de los parqués, pocas sesiones más podría durar el festín. Por el momento, los agentes del mercado se han hecho con títulos estratégicos para sus carteras, a unos precios muy atractivos, a la espera de lo que pueda ocurrir. Porque ni la crisis de deuda soberana ni los temores sobre la economía española se han disipado. La liquidación de la jornada podría haber sido aún peor, si no hubiera sido por el "efecto contagio" que llegaba desde Wall Street, donde los títulos apuntaban al alza. Al final, el Ibex-35 se deja un 0,84% de su valor y se sitúa en los 7.150 puntos. Se le atraganta la resistencia de los 7.200 puntos, en la que sólo se ha podido mantener una jornada.

La evolución del mercado secundario de deuda muestra la inquietud imperante en torno a los títulos soberanos. La prima de riesgo vuelve a retomar el sendero de la volatilidad, hasta alcanzar los 545 puntos básicos. A pesar de que todo parece indicar que habrá rescate, y que será beneficioso para los inversores, el "spread" entre España y Alemania no baja de los 500 puntos desde los primeros días de julio. El precio que se exigen los inversores por el bono español a 10 años se encuentra muy cerca del 6,90% y el del "bund" alemán, en el 1,43%. Las sesiones en las que la prima se ha reducido no ha sido precisamente porque haya descendido demasiado el coste del bono español, sino porque ha aumentado el germano. Además, el interés del bono a dos años se dispara hasta el 3,73%.

En el caso de los índices bursátiles continentales, casi todos han sucumbido a las minusvalías, aunque de forma más moderada que en el caso del Ibex-35. Entre todos los parqués europeos, el que más terreno se ha dejado por el camino ha sido el CAC parisino (-0,43%), seguido por el Eurostoxx-50 (-0,33%), el DAX alemán (-0,03%) y sólo el FTSE londinense consigue subir un 0,08%. El precio del barril de Brent se mantiene en los 111 dólares, una referencia que no se veía desde mediados del mes de mayo. Y lo peor para la economía es que la evolución del crudo no muestra síntomas de debilidad, al menos a corto plazo. En el caso del euro, se cambia a 1,23 dólares.

Mercado español

Varios títulos bursátiles del Ibex-35 han protagonizado esta jornada. El primero de ellos, Bankia, cuyas acciones han conseguido apuntarse una revalorización cercana al 25%. La volatilidad en el valor es máxima, pues los inversores esperan una primera inyección de capital por parte del fondo de rescate europeo para la banca española. Y la entidad sería la más beneficiada. Sus acciones, que hace apenas tres semanas se pagaban a 50 céntimos de euro, ya cotizan por encima de 1,27 euros.

También ha sido destacable el comportamiento de IAG y Amadeus. Iberia, integrada en la aerolínea junto a British Airways, anunciaba el "préstamo" de un 6,6% que tenía en Amadeus. La cotización de la tecnológica se encontró paralizada durante buena parte de la mañana y, al volver al mercado, acabó dejándose un 6,57%.

Entre los grandes valores, la indefinición fue la muestra de que los inversores ni quieren tomar más posiciones en los "blue chips" ni apuestan por una drástica caída de precios. Así, Telefónica se mantuvo en plano, con los 10,10 euros como referencia, mientras que Santander apenas cayó un 0,13%, BBVA un 0,35%, Iberdrola un 1,07% y Repsol un 2,80%.

En el Mercado Continuo, los títulos que más terreno se dejaron fueron los de Urbas (-8,33%), Inm. Del Sur (-7,65%) y Service Point (-6,15%). Por su parte, las mayores ganancias llegaban de la mano de Dermoestética (10,91%), FAES (6,08%) y Banco Valencia (5,26%).