Las caricaturas y acuarelas que aparecen en "Gainsbourg (Vida de un héroe)" fueron realizadas por su director, Joann Sfar. / Avalon Productions
CINE

Gainsbourg, el mito

El director francés Joann Sfar debuta en el cine con una biografía sobre el cantante, letristas y vividor francés

MADRID Actualizado: Guardar
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Je t'aime, moi non plus. Esta canción de 1969 no dejó indiferente a nadie. Gustó o escandalizó a toda una generación de europeos. A España llegó con retardo, claro. Las autoridades franquistas impidieron por todos los medios que se escuchara aquí. Los gemidos eróticos de la canción no eran aptos para los oídos hispanos. A Brigitte Bardot tampoco le hizo mucha gracia. Un año antes había grabado la canción, pero el temor a que su imagen se viera perjudicada hizo que desistiera del proyecto. La sustituyo Jane Birkin, que se había convertido en la nueva, musa, amante y compañera del hacedor de esta polémica: Serge Gainsbourg.

Ahora, el director novel Joann Sfar se ha atrevido con el mito en su primera película, Gainsbourg (Vida de un héroe), que se estrena este viernes en España después de haber arrasado en el país vecino. Más de un millón de franceses se acercaron a las salas para descubrir la visión de este dibujante de cómics sobre uno de los iconos de la cultura popular. “A lo mejor para las próximas películas sigo con los iconos franceses: De Gaulle, Carla Bruni o la selección francesa de fútbol. Domenech puede tener una peli”, ha asegurado Sfar entre risas.

La elección de Serge Gainsbourg (parisino nacido como Lucien Ginzburg en 1928 y fallecido en 1991) no fue casual. El director se sentía atraído por la vida noctambula y en cierto punto bohemia del personaje. “Me gusta este tío, ya que me permite homenajear a los musicales como Un americano en París y jugar con clichés de París, como el amor, los artistas y las mujeres”, ha apuntado. El desconocido Eric Elmosnino se transforma en el cantante, un ser inseguro. “Quiere hacer un montón de cosas para que la gente, sobre todo las mujeres, se interese por él. Por eso hacía cosas muy inteligentes o terribles tonterías para conseguir la atención”, ha explicado el realizador de Niza.

El mito, encantada

Laetitita Casta y la malograda Lucy Gordon (falleció dos semanas después de terminar el rodaje) son Brigitte Bardot y Jane Birkin, respectivamente. La breve pero intensa presencia de Casta en la película ha desatado todo tipo de elogios, hasta del propio mito. Bardot ha asegurado que la modelo ha sido la mejor elección para recrearla en la gran pantalla. “Laetitia es maravillosa. Es el sol. La Bardot estuvo muy feliz al saber que ella tenía su papel. Es la única francesa hoy en día que es famosa en el mundo entero”, ha indicado el director. “La más famosa junto a Bruni, claro”, ha exclamado en un buen español, fruto de sus antepasados peninsulares, y entre risas.

Como curiosidad, destaca que todas las caricaturas y acuarelas que aparecen en la película fueron realizadas por el propio Sfar. Además, la compañía barcelonesa DDT Efectos Especiales, que había colaborado con Guillero del Toro en El laberinto del fauno, es la encargada de los monstruos que acompañan a Gainsbourg a lo largo de se vida.