MAREA NEGRA EN EEUU

Obama amplía a seis meses la moratoria sobre las perforaciones petrolíferas tras el vertido del golfo de México

El mandatario ha señalado que quienes acusan al Gobierno de escasa capacidad de reacción "no conocen los hechos"

WASHINGTON Actualizado: Guardar
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El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha confirmado la ampliación de la moratoria sobre nuevas perforaciones petrolíferas en alta mar como consecuencia de la falta de avances en la contención de la marea negra del golfo de México, originada tras el hundimiento de una de estas instalaciones el pasado 22 de abril.

En una rueda de prensa en la Casa Blanca, Obama ha calificado la situación como "un desastre sin precedentes" y ha aclarado que desde el primer momento "el Gobierno ha estado al cargo de la respuesta" al vertido. El mandatario, que recibió esta semana un informe del Departamento del Interior sobre la situación en el golfo, ha señalado que quienes acusan al Gobierno de escasa capacidad de reacción "no conocen los hechos". "Ha sido nuestra máxima prioridad desde que ocurrió la crisis", agregó, un día antes de visitar la zona afectada por segunda vez desde la destrucción de la plataforma.

La Administración norteamericana se encuentra en el punto de mira por una aparentemente lenta reacción al desastre, del que Obama ha vuelto a acusar directamente a la compañía británica BP, que ha tratado sin éxito de sellar la fuga de crudo que se encuentra a 1,5 kilómetros bajo la superficie marina. En este sentido, ha reiterado que la empresa "pagará por todo lo que ha hecho, tanto para parar la fuga como para mitigar el daño", y ha anunciado que el Gobierno también determinará de forma paralela el alcance de los daños ecológicos y económicos.

Trabajos de la Comisión

Obama ha creado una comisión especial para investigar las causas del vertido, el mayor de la historia de Estados Unidos, y previsiblemente hasta que los trabajos de este grupo no concluyan no se reactivará la actividad de las plataformas. Asimismo, ha denunciado que el Servicio de Gestión de Minerales, encargado de supervisar este tipo de extracciones, ha mantenido una relación "íntima" y "escandalosamente cercana" con la industria petrolera.