Los acusados dicen que ellos también pagaron mil euros para subirse a la patera

Los acusados de la muerte de diez magrebíes en las costas del cabo de Trafalgar en el hundimiento de una patera han negado hoy en el juicio las acusaciones y han asegurado que viajaban a España como las víctimas y, como ellas, habían pagado unos mil euros al jefe de la red, que murió en el siniestro.

El juicio por el hundimiento de esta patera, ocurrido el 29 de junio de 2009 cuando la embarcación estaba a unos 200 metros de la costa gaditana, se ha iniciado hoy en la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Cádiz con las declaraciones de los seis acusados, todos ellos, según el fiscal, miembros de una red dedicada a introducir ilegalmente en España a inmigrantes desde Marruecos.

En su escrito de conclusiones provisionales el fiscal pide un total de 564 años de prisión para los seis marroquíes procesados por el hundimiento de esta patera, en la que viajaban, sin ninguna medida de seguridad y en una barca que hacía aguas, más de cuarenta personas.

Su hundimiento causó la muerte por ahogamiento de diez de ellas, entre otras el supuesto jefe de la red Hassan Belabd, aunque otros diez inmigrantes que viajaban en la barca continúan desaparecidos, mientras que hubo quince supervivientes, entre ellos cuatro menores de edad.

Cuatro de los acusados -Abdelkarim El Anbar, Khalid Drabach, Adil Elamber y Ali Araba-, viajaban en la patera, mientras que otros dos, Noureddine Belabd, hermano del jefe de la organización, y Rahal Benchick, fueron detenidos en la costa de Cádiz , donde, según el fiscal, aguardaban la llegada de los indocumentados para llevarlos a otros puntos del país.

Estos dos acusados han aceptado un acuerdo de conformidad con las acusaciones del fiscal para ver reducida su petición de condena de diez a cuatro años por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.

Sin embargo, los otros cuatro acusados, a los que el fiscal imputa además de este delito diez homicidios a cada uno de ellos, han decidido no aceptar este acuerdo de conformidad y declarar en el juicio que ellos son inocentes y que viajaban en la patera no como miembros de la red, sino como unos inmigrantes más.

Tras los testimonios de los seis acusados, el tribunal ha escuchado las grabaciones de las declaraciones que algunos de los supervivientes realizaron poco después de llegar ante la Guardia Civil y el juzgado.

Ellos contaron que los miembros de la red les amenazaron para que se subieran en la barca, que venían "como sardinas", que no comieron en dos días y que algunos de los miembros de la red desequilibraron la patera para provocar su vuelco.

Estas declaraciones son más coincidentes con el fiscal, que relata que los miembros de la red obligaron a los inmigrantes a subirse a la barca con armas ya que, al ver el estado de la patera algunos de ellos se negaron a subir a bordo y que antes de llegar a la costa española, y sabiendo que muchos de ellos no sabían nadar, volcaron la nave.