Cádiz C.F.

Hierro para el Cadiz

Julián Rubio quiere que Paz tome el papel de líder en la medular en el equipo amarillo

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Abraham Paz debe ser el Fernando Hierro de este Cádiz. Eso es lo que quiere su entrenador, Julián Rubio. Temperamental, de la casa, fuerte en defensa, con buen desplazamiento de balón y un gran remate de cabeza. Ahora, tendrá que echarse el equipo a las espaldas y llevar el peso del equipo para certificar la permanencia en Segunda División.

Es el mensaje que le ha transmitido el técnico manchego. El trabajo es tan duro que esta semana ha sufrido una sobrecarga por el esfuerzo realizado en Málaga. El miércoles se retiró antes del entrenamiento por precaución, pero ayer ya pudo trabajar con normalidad.

En La Rosaleda, el equipo pecó de falta de mordiente ofensiva. Durante toda la semana, Rubio ha trabajado el paso de la defensa al ataque, donde ha estado la mayor carencia del Cádiz esta temporada. En este apartado, dos hombres tendrán un peso esencial. Líbero Parri en la media punta y Abraham Paz como centrocampista organizador.

Satisfecho

El jugador se encontró cómodo en esa posición, que no es del todo nueva para él. En sus inicios destacó como medio centro, y ahí jugó una temporada completa en el Racing Portuense en Tercera División. Carlos Orúe también lo alineó varias veces en esa zona, y fue Jose González quien lo retrasó definitivamente a la posición de central ya que lo consideraba demasiado lento para la medular.

Está satisfecho pero se exige mucho más, especialmente en el plano atacante. «Estuve cómodo en lo defensivo, pero en este partido habrá que atacar más» porque sólo vale la victoria. El futbolista estuvo pendiente en Málaga de las incursiones de Antonio Hidalgo, y retrasó su posición en muchas ocasiones, pero este domingo tiene órdenes expresas de llevar el timón y conectar con Parri para la creación del juego. De todas formas, la misión sigue siendo «mantener la portería a cero», porque consiguiendo este objetivo, el gol cadista debe llegar a lo largo de los noventa minutos.

Paz está convencido de que puede dar lo que quiere el míster, además de su importancia en las jugadas de estrategia (aunque este año sólo lleva tres goles), y cree que sólo le hace falta rodaje. «Hace cinco o seis años que no jugaba ahí, pero me encuentro bien». Esta temporada apenas se han dado esos desplazamientos en largo que tantos goles han supuesto para el Cádiz. «Somos un equipo diferente al de otros años. Ha cambiado la forma de jugar, y no hacemos hincapié en esos movimientos».

Advierte de la importancia de ganar este choque ante el Sevilla «porque nos jugamos toda la temporada esta semana. Espero que los resultados acompañen porque no quiero que nos tengamos que jugar la permanencia en Alicante».

Nada de relajación

El futbolista se muestra convencido de que este fin de semana los tres puntos se quedarán en Carranza. Pero no serán un regalo. «Quien piense que nos tomamos el partido relajado o que no pondrán problemas se está equivocando. Aunque no se juega nada, el Sevilla Atlético es un filial y siempre quiere hacerlo bien».

Comenta que «tienen un partido importante y a todo el mundo le gusta jugar en un Carranza lleno». Los pupilos de Galeote «han realizando una temporada bastante buena, varios jugadores han actuado con el primer equipo, y es el único filial que está en Segunda. Por algo será».

Esta vez, pasa de pedir más apoyo a la afición. «Creo que no hay que pedirle más. Lo hemos solicitado muchas veces». Ahora les toca hacer a ellos.

«Siempre quería jugar ahí»

Carlos Orúe es uno de los entrenadores más importantes en la carrera de Abraham Paz. El técnico lo alineó tanto de central como en el centro del campo, donde jugó gran parte de la segunda vuelta. Orúe recuerda que «siempre quería jugar en la medular. No tenía confianza en sus facultades como defensa, y al final ha acabado jugando ahí en Primera División».

Destaca que «es un gran futbolista, con las ideas claras y que lo puede hacer perfectamente en las dos posiciones. Le pega bien desde media distancia, se incorpora al ataque, donde destaca en el remate de cabeza, y defiende muy bien los balones aéreos».

No cree que se deba comparar con Hierro, «porque cada uno tiene sus cualidades. Quizás por el liderazgo, ya que es importante en el vestuario. Pero lo importante es que tiene cualidades para jugar en las dos posiciones».