5 Razones para ver El Exorcista, la serie de 2016

El Exorcista, una de las series imprescindibles de 2016

Pese a la marcada actividad de Fox como canal de televisión en España, El Exorcista, una de sus series más exitosas del pasado 2016, ha llegado a nuestro país de la mano de HBO, y aunque lo ha hecho a la sombra de títulos como Westworld, The Night of o The Young Pope, hay que admitir que ha sido una de las grandes sorpresas que la plataforma de VOD nos trajo con su esperada llegada.

El Exorcista parecía que sería otra de esas series que, aprovechando el éxito de una película, intentaban hacerse un hueco en el mercado televisivo.

Afortunadamente, la historia que mostraba (la de unos sacerdotes que intentan ayudar a una familia cuya hija esta poseída), sus personajes y las sorpresas que incluía, la hicieron diferenciarse de otros productos similares, haciéndola triunfar en las cadenas y plataformas en que se estrenó.

Si aún no las has visto y buscas una nueva serie a la que darle una oportunidad, a continuación doy cinco razones para animarse a disfrutar de la serie de televisión de El Exorcista, una de las mejores que se han estrenado en 2016.

Más que un remake

La sinopsis de la cadena apuntaba a que la serie de El Exorcista sería un remake. Con dos sacerdotes, uno joven con problemas de fe y otro más veterano convencido de que era un instrumento de dios, pretendiendo ayudar a una familia, la historia parecía que mostraría una actualización de la obra Willian Friedkin ambientada en nuestro días, pero finalmente ha sido algo muy diferente.

El Exorcista no solo es un producto 100% original, sino que tiene conexiones directas con la película que triunfó en los 70, y curiosamente, presenta también algunas similitudes con Outcast, un show de poseídos estrenado en Fox a principios de año que, pese a que prometía mucho, acabó decepcionándome profundamente.

Evidentemente, no os diré cuáles son estas conexiones y similitudes, pero si habéis visto ambas obras (la película de 1975 y la serie que adapta el cómic de Robert Kirkman), quedaréis gratamente sorprendidos.

Terror en su dosis justa

Es difícil causar terror en los tiempos que corren, y pese a que la película de El Exorcista sigue siendo uno de los filmes más terroríficos de todos los tiempo, era difícil que su “versión” televisiva consiguiera el mismo efecto que ella.

La principal razón es que al contrario que en los 70, los espectadores actuales ya han visto casi de todo, así que había que jugar bien las bazas para conseguir un producto que consiguiera dar miedo.

Para ello, los productores de la serie han convertido a los personajes poseídos en seres realmente peligrosos, los cuales, además de atormentar a sus seres queridos, han puesto en marcha acontecimientos tan terribles como pueden ser asesinatos en masa, algo que, lejos del terror sobrenatural, inquieta al más pintado.

Así pues, cuando veáis de que son capaces los “acólitos” de los poseídos, os daréis cuenta de cuán importante es la presencia del mal demoniaco en esta serie.

Un reparto espectacular

Las series de televisión cada vez cuentan con repartos más espectaculares y en el caso de El Exorcista, tenemos estrellas de primer nivel. Por encima de todos, destaca Geena Davis, la actriz que hizo de Thelma en el clásico Thelma y Louis, y que aquí interpreta a una devota madre de familia.

Davis esta soberbia en su papel, y esta abrigada por la presencia de otras caras conocidas como son las de Alfonso Herrera (uno de los protagonistas de telenovela mexicana Rebelde y que tras eso ha participado en un montón de proyectos interesantes como la reciente Sense8), Ben Daniels (conocido por papeles recientes en Rogue One, Flesh and Bone o House of Cards) o Hannah Kasulka (The Green Room), que interpreta magistralmente a la joven poseída del film.

Todos aportan un valor incalculable a la serie, y aunque esto pudiera parecer algo que atribuir a los personajes, no me los imagino interpretados por otros actores y actrices que pudieran haber aportado más al show.

Visión original de las posesiones

Los productores de El Exorcista se han documentado muchísimo sobre el fenómeno paranormal de las posesiones. Esto les ha servido para tener una visión muy completa de este rito que, pese a que aquí se muestra como estrictamente católico, está muy presente en todas las religiones y culturas del mundo.

Así pues, lejos de centrarse en vómitos, caras raras y lenguas muertas, los guionistas han incorporado la figura del demonio como un personaje más. Una presencia que atormenta a la víctima y que la hace danzar a su antojo a medida de que la posesión va aumentando.

Llama la atención como han sabido plasmar testimonios muy comunes en los que las personas con problemas de este tipo aseguran que sienten como si alguien se sentará encima de ellos y además, han intentado dotar de cierto realismo a este fenómeno, zanjando de forma radical esa escena de la obra original en la que Regan aparece girando su cuello 360ª grados.

Por si fuera poco, El Exorcista no muestra un solo caso de posesión, sino que introduce la idea de que los demonios campan a sus anchas por la Tierra y tienen planes para todos aquellos que consideran sus enemigos.

Teológicamente atrevida

En los últimos años, la iglesia católica, y el cristianismo en general, ha soportado una serie de manifestaciones en contra debido a su posición de poder durante siglos, y en El Exorcista, se justifica la razón de que sacerdotes e incluso papas hayan podido ser tachados de seres malignos.

Además de eso, El Exorcista se atreve a dotar a los demonios de una personalidad cercana a la de iluminados, presentándolos como ángeles que se rebelaron contra un dios injusto, algo que durante un tiempo podría haber sido tachado de herejía, y que actualmente está muy en la línea de lo que suscriben las religiones consideradas satánicas.

Así pues, un show capaz de poner de manifiesto los fallos de la iglesia católica y que no tiene miedo de exponer las creencias de grupos religiosos sediciosos, me parece todo un acierto, y estoy seguro de que dotará de mucho ritmo e interesa a una más que probable segunda temporada.

Os recomiendo encarecidamente que le deis una oportunidad a esta serie, ya que pese a que no es la más terrorífica del momento, creo que es de las más frescas y de las que, al menos por ahora, te mantienen pegado al televisor sin necesidad de florituras y tramas especialmente complicadas.