Jesús Torresano Perea, nuevo párroco de Lillo

Cientos de fieles abarrotaron este domingo la iglesia parroquial de San Martín Obispo, en Lillo, con motivo de la toma de posesión de su nuevo párroco Jesús Torresano Perea, en una eucaristía presidida por el obispo auxiliar de Toledo,Ángel Fernández Collado, y concelebrada por tres decenas de sacerdotes –que no cupieron en el altar-, el vicario de La Mancha, Emilio Palomo, y el arcipreste de la zona Rafael del Álamo.

Al acto se sumaron, decenas de personas de La Puebla de Almoradiel, pueblo natal del sacerdote, así como numerosos feligreses procedentes de las distintas parroquias en las que ha desempeñado estas funciones: Erustes, Mesegar de Tajo, Otero y Domingo Pérez.

Jesús Torresano, es un joven de 30 años, hijo único de una familia muy humilde, especialmente querida y respetada en su pueblo, que tuvo la desgracia de perder a su padre, de forma trágica, cuando él estaba recién llegado al Seminario de Toledo.

Cantó su primera misa en La Puebla de Almoradiel en julio de 2008.

El obispo alabó su corta trayectoria y lo presentó como «un regalo de Dios a este pueblo» y pidió a los fieles ayuda para desarrollar su ministerio. Por su parte, Jesús Torresano, con tanta ilusión como emoción, saludó al pueblo de Lillo, a sus autoridades e instituciones, pidiéndoles colaboración en su labor apostólica.

El nuevo párroco sustituye a Tomás Lara Salido, natural de Miguel Esteban, a quien, tras 17 años de una encomiable labor pastoral en Lillo, le ha llegado la jubilación.