Conjuntivitis en perros y gatos

¿Quién no ha oído hablar de la conjuntivitis alérgica y quién no la ha padecido? Efectivamente, es frecuente en nosotros, pero en nuestras mascotas también

CARMEN ANIORTE

Con la Primavera, el ojo, y en especial su membrana conjuntiva, podría inflamarse con los microscópicos alergenos ambientales que flotan en el ambiente. Pero no sólo la primavera y sus alergénicos serán los causantes de esta inflamación ocular, como veremos. El ojo de nuestros animales de compañía ha de permanecer brillante, pues estará perfectamente humectado por la película lacrimal. Se muestran abiertos, enseñándonos una mirada franca y cómoda, animada con un sosegado y tenue parpadeo.

«Es aquí precisamente donde los propietarios percibirán el inicio del problema: uno de los ojos ,o ambos ,estarán cerrados o entrecerrados, denotando cuanto menos, incomodidad», comenta el veterinario Javier Álvarez de la Villa, del Centro Veterinario Víctor de la Serna. El ojo incómodo, pues, se entrecierra (conocido por los especialistas como blefaroespasmo palpebral), pero podría no conformarse con eso y además, el tercer párpado participaría apareciendo desde el canto medial ocular, como una «telita» o «cortinilla» que coopera bajo los párpados principales en el cierre. Incomodidad, pues, es lo que denotan los ojos entrecerrados y se convierte en motivo de innumerables consultas al Veterinario. Pero este síntoma casero fácilmente perceptible por el propietario, no vendrá sólo.

El perro podría mostrarse apático, tembloroso y escondido. Además, en no pocas ocasiones,se frotan contra enseres o ayudados de sus «manos o zarpas», pudiendo originar graves empeoramientos. Por tanto, este último síntoma en nuestros perros y gatos, nos indicaría que sienten dolor, incomodidad y seguro que picor, que ellos mismos intentan aliviar.

Actuación rápida

Ya en la Clínica Veterinaria, la observación es más minuciosa. Los veterinarios observan membranas conjuntivales enrojecidas (eritematosas). Esta fina membrana muy vascularizada que tapiza la superficie interna de los párpados (conjuntiva palpebral) y también del propio ojo (conjuntiva bulbar), se inflama. «Como veremos, podría hacerlo en respuesta a multitud de agentes irritantes o agresivos para el ojo», comenta el veterinario consultado. Un grupo de conjuntivitis afecta con frecuencia a gatos cachorros. Son de naturaleza infecto-contagiosa. Herpesvirus, clamydias ,mycoplasmas podrían participar. Los ojitos del gato, muchas veces cachorro, podrían llegar a afectarse gravemente.

Gran inflamación conjuntiva, secreciones purulentas abundantes, ulceras craneales típicas en los herpesvirus, edematizacion o gran inflamación de la conjuntiva palpebral frecuente en clamydia. Estos gatitos o también gatos adultos , se muestran muy incómodos, pero lo peor de todo, podrían perder de manera definitiva su sentido visual si no se actúa rápida y eficazmente. Actuar así, es diagnosticar de manera rápida la etiología del proceso (agente causal) y consecuentemente realizar el tratamiento más adecuado. Un tratamiento equivocado podría empeorar la situación de manera irreparable.

Cuerpos extraños

En perros son frecuentes los cuerpos extraños. Los perros, en su naturaleza indagadora ,se aventuran muchas veces bajo matojos y arbustos ,y lo pueden hacer alocadamente. Entonces los restos vegetales podrían penetrar lesionando el ojo. La conjuntiva se torna roja. El perro se incomoda, cierra los tres párpados y con la pata intenta eliminar aquello que le molesta. La situación puede empeoraren este «su intento».

En la consulta, «los veterinarios observamos, en ocasiones, restos vegetales clavados (semillas, espigas). Permanecen escondidos bajo los párpados o incluso bajo la “ telilla" del tercer párpado», comenta Javier Álvarez de la Villa. Los extraen con micro pinzas oculares , micro chorros de agua a presión e inician un tratamiento a seguir. En estos casos es necesario actuar con rapidez, pues la córnea ( «ventana» transparente de la parte anterior del ojo)podría lacerarse (úlcera corneal). En ocasiones la exploración ocular puede deparar sorpresas. Bajo los párpados podrían aparecer lombrices de «aspecto repugnante» (Thelazia).

Pues vean, una inocente mosca tiene el gusto de alimentarse de las lágrimas de otros y,así ,transmite este parásito . Como decimos, el aspecto es horripilante. Al levantar el párpado, comienzan a moverse en un frenético baile de contorsiones y retorcimientos. Será preciso eliminarlas mediante finas pinzas oculares. Además de un preceptivo tratamiento con efecto parasiticida. Pero no todos los ojos rojos son conjuntivitis. La confusión diagnóstica podría resultar funesta. El ojo rojo podría deberse a otras patogenias diversas como el glaucoma (aumento de la presión intraocular), la uveitis (inflamación de la membrana uveal interna del ojo) e incluso la Policitemia ( aumento desmesurado de la producción de glóbulos rojos). Entonces, evidentemente, la palabra clave es Diagnóstico. No todo son conjuntivitis. Vigilemos los ojos de nuestros pequeños animales. Cuidemos su mirada transparente y cristalina. Esos ojos prodigios de la evolución y milagro sensorial que son únicos e irremplazables.

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