Rajoy: «La meta es descarbonizar nuestra economía»

El presidente de Gobierno, Mariano Rajoy, ha dicho este jueves que el Ejecutivo va a trabajar para «impulsar la transición de nuestra economía hacia una baja en carbono» que implica «un cambio profundo en nuestro modo de producir y de consumir». Para ello –aseguró- la Ley de Cambio Climático y Transición Energética que espera aprobar en esta legislatura se apoyará en dos pilares: la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y el progreso hacia un nuevo modelo productivo y de consumo sostenible.

Con este discurso –el de mayor contenido medioambiental de los últimos años- el presidente del Gobierno inauguró las jornadas «España, juntos por el clima», que reúne jueves y viernes en Madrid a administraciones, representantes de grupos políticos, empresas, sector financiero, ONG, sindicatos, científicos y juristas para que den su visión para la elaboración de esa Ley de Cambio Climático y Transición Energética, que permitirá a España cumplir los objetivos internacionales de lucha contra el cambio climático recogidos en el Acuerdo de París y poner a nuestro país en la senda adecuada para que sea un país casi neutro en emisiones a mediados de siglo.

Para dar respuesta a «una de las encrucijadas más importantes que hemos enfrentado a lo largo de la historia» –dijo el presidente en referencia al cambio climático- y a «la responsabilidad de dejar a las generaciones venideras un mundo mejor”, la meta es clara: descarbonizar nuestra economía para poder así “minimizar los impactos”. Unos impactos que ya se están produciendo, y algunos de los cuales el presidente enumeró: el nivel del mar ha aumentado 20 centímetros; el hielo ha reducido su espesor y volumen; los glaciares retroceden y algunos desaparecen; los desiertos avanzan, y los fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más frecuentes.

Sistema energético seguro y competitivo

La futura Ley de Cambio Climático y Transición Energética, para la que el Gobierno quiere buscar el máximo consenso, tendrá como objetivo, por tanto, «descarbonizar los principales sectores productivos, fortaleciendo nuestra competitividad y protegiendo nuestros recursos naturales». En este sentido, el jefe del Ejecutivo dijo que «un sistema energético sostenible, seguro y competitivo no solo nos permitirá cumplir con nuestros compromisos internacionales, sino que la política ambiental y energética debe ser el pilar de nuestro crecimiento. Esto mejorará nuestro bienestar».

Entre otras medidas en las que el Gobierno ya está trabajando para impulsar esa transición energética, Mariano Rajoy anunció una nueva subasta de renovables por otros 3.000 MW, tras la exitosa acogida y alta demanda de la primera. En clave de compromiso internacional, el presidente recordó que España se ha comprometido a aportar 900 millones de euros anuales a partir de 2020 para financiación climática de los países menos desarrollados, que se suman a los 1.400 millones de euros aportados entre 2012 y 2015.

Por su parte, el comisario europeo de Acción por el Clima y Energía, Miguel Arias Cañete, quien participó en la inauguración, dijo que esta ley de Cambio Climático que prepara España, será «un instrumento fundamental», junto con el Plan de Clima y Energía, que cada país europeo debe presentar antes de que termine el año, y la Estrategia de Descarbonización a 2050, que debe estar lista en 2018.

Compromisos de España

El compromiso de reducción de emisiones de la UE para 2030 es reducirlas un 40% en 2030 en su conjunto con respecto al nivel de 2005, y en el reparto interno a España le corresponde una reducción del 26% en los llamados sectores difusos (transporte, agricultura, residencial y residuos), casi el triple que le objetivo del 10% que tenemos para 2020, mientras que el sector industrial y energético debe reducirlas un 43%. No es tanto como pueda parecer, entre 2005 y 2015 las emisiones de estos sectores, afectados por el mercado europeo de derechos de emisión, cayeron un 24%.

España trabaja ahora en definir los objetivos a 2030 de generación de energías renovables y eficiencia energética, que presentarán a la Comisión Europea antes de que termine el año. Después, la CE deberá comprobar que los objetivos nacionales en renovables y eficiencia de todos los Estados miembros suman un aumento del 27% y del 30%, respectivamente, que es el objetivo conjunto de la UE en esos sectores.

Al no haber marcado un mínimo por país, habrá países con objetivos muy ambiciosos que ayuden a alcanzar la meta conjunta aunque otros apenas hayan contribuido a la misma. Se da por hecho que España fijará un objetivo por encima de la media europea.

A la inauguración de estas jornadas asistieron la ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina; el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal; la secretaria de Estado de Medio Ambiente, María García, y la secretaria de Estado de Turismo, Matilde Asian, entre otros.