Recuperar las habilidades perdidas tras el Covid-19

El hospital Benito Menni cuenta con la única unidad de rehabilitación post-Covid en Castilla y León

Equipo de profesionales que trabajan en la Unidad post-Covid del Benito Menni ABC

Henar Díaz

«Fue muy duro verme en las condiciones que salí de la UVI, pero al tercer día en el Benito Menni ya comencé a notar el trabajo de los fisioterapeutas. Todos los días lloraba de gozo y alegría». Es la experiencia que Mercedes Rodrigo (60 años) recuerda, ya totalmente recuperada, de su paso por la Unidad de Rehabilitación post Covid de este centro hospitalario vallisoletano perteneciente a la Congregación de Hermanas Hospitalarias , el único de estas características en Castilla y León.

Mercedes llegó a él el 3 de junio tras permanecer ingresada más de dos meses en el Hospital Río Hortega de Valladolid, con 38 días entre la UVI y la Unidad de Cuidados Intensivos, tras sufrir un infarto de miocardio, que se sumó a la neumonía bilateral provocada por el coronavirus. Pero si siente agradecimiento hacia los profesionales de las unidades de críticos, tanto más lo está hacia los que le ayudaron en el Benito Menni a «recuperar mi cuerpo» después de «llantos, mucho miedo y dolores muy intensos» mientras trataba de activar todas las atrofias musculares que tenía.

Desde que se pusiera en marcha, el pasado 20 de abril, han pasado o permanecen en esta unidad 23 pacientes -17 de los cuales ya han sido dados de alta-, a los que la enfermedad o su paso por las unidades de críticos dejó graves secuelas como dificultad respiratorio y complicaciones para comer, hablar o moverse. «Normalmente nos llegan con inmovilismos, pero también con trastornos del lenguaje bien por el propio edema que causa el virus o muchas veces por la intubación o las traqueotomías que les tuvieron que practicar», explica la doctora Socorro Ríos, directora de la unidad.

Al igual que con los meses se va conociendo más del virus, también desde este servicio saben mejor como abordar las secuelas «en el sentido de que vamos más a tiro fijo, a forzar motóricamente más rápido para intentar recuperar a los pacientes en menos tiempo». Aunque siempre hay algunas secuelas como los trastornos del olfato y el gusto «que tardan mucho más en recuperarse» y que desde esta unidad trabajan con la logopeda : «Es la última novedad que hemos incorporado, ya que al principio nadie nos comentaba ninguna secuela olfativa ni de sabor».

Con el tiempo también, y a base de observar a sus pacientes se dieron cuenta de que «no sólo necesitábamos fisios y logopedas, sino también el trabajo de un neuropsicólogo » ya que algunos presentaban «lagunas» de memoria al intentar mantener una conversación. Al neuropsicológo, cuya valoración se incluye ahora ya desde el ingreso del paciente, se suman en esta unidad un terapeuta ocupacional , una logopeda y dos fisioterapeutas .

Con una capacidad actual de 25 camas, el servicio podría llegar a ampliarse hasta «40 ó 50», explica la doctora, quien detalla también que en las últimas semanas están percibiendo «un segundo pico de ingresos».

Sin poder estar de pie

La intención del Benito Menni es mantener la unidad más allá de la pandemia, ya que «hemos visto que la rehabilitación respiratoria es muy necesaria», al igual que tratar los inmovilismos como consecuencia de ingresos muy prolongados en el tiempo: «Después de casi 10 días en cuidados intensivos se pierde casi un 50 por ciento de la masa muscular y nos llegan sin poder sostenerse en pie».

Fue el caso de Juan Carlos Pérez, el «más difícil» de los que han tenido. «Llegó tetrapléjico» , pero tras «mucho trabajo» por su parte terminó «marchándose andando» : «En este paciente, no fue sólo la recuperación motora. También psicológica». La estancia media de los enfermos es de «dos meses y medio». Mercedes tiene grabado a fuego su salida, el 27 de agosto, aquella sensación de «sentirme libre porque mi cuerpo me lo permitía». Aprovecha su paso de nuevo por esta unidad con motivo de esta entrevista para trasladar su ánimo a Roza Milchova y Nuria, ingresadas desde principios de octubre tras pasar por la UCI. A estos y otros tantos pacientes que han tenido quiere dedicarles la doctora Ríos el Premio ABC Salud que se ha concedido a la Unidad post Covid como Mejor Iniciativa en un Hospital Privado.

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