Modric, un creador para cortar balones

Vive una reconversión natural, la que solo pueden ejecutar los grandes futbolistas. De ser interior en el Real Madrid ha pasado a ser medio centro defensivo sin perder sus virtudes creativas. Modric ha realizado un cambio trascendental en su juego y no se nota. Ancelotti sabe transformar a los grandes creadores en buenos pivotes centrales de la línea media. Luka es ahora un constructor que juega atrasado, al lado de Toni Kroos, para taponar el contragolpe rival, cortar, robar, recuperar balones y lanzar de nuevo el ataque con sus regates y con sus centros a Bale, James, Isco, Cristiano y Benzema.

«Soy un medio defensivo, ¿Que no? Pregúntale al míster», señala Modric. Ancelotti asiente. La capacidad de este entrenador para reconducir a un futbolista sin frenar sus cualidades es ilimitada.

El croata dio frente al Rayo 52 pases, 42 buenos y 10 malos. Es un promedio similar al de la temporada pasada, cuando jugaba diez metros más adelantado y era el responsable de romper la línea media rival con su regate y sus pases a los puntas.

Ahora genera muchos pases ofensivos, utiliza igualmente su «dribling» para desatascar la presión enemiga e incluso dispara para marcar goles como el que solucionó el partido en Villarreal.

Es, Modric, un nuevo jugador. El primer enlace de Kroos para tocar el balón, controlar el partido, llevar el tempo y encontrar la profundidad de Bale, Cristiano y Karim. Mantiene sus características de director conjunto, a la vera del alemán. Lo único que le pide Ancelotti es que no suba como antes. Que cuide las espaldas del equipo.