Vídeo: La Guardia Civil de Cádiz, ante todos los peligros por la seguridad en el mar

Casi cien mil personas llenaron por tierra y por mar el año pasado Cádiz con motivo de una de las competiciones marítimas más seguidas del mundo y que acogió con excelente éxito la capital gaditana, la Sail GP. Un gran evento, multitudinario en el que todas las piezas tienen que encajar para que se pueda celebrar. Y para que además de poderse realizar sea seguro. Sin seguridad, sin garantías de control, sin ausencia de peligros, sin evitar cualquier riesgo, no hay Sail GP. Ni ninguna otra actividad de este calado, porque, ante todo, está la vida, la salud y el que todo vaya bien.

Y de ello se encargan las fuerzas policiales y los servicios sanitarios, quienes ante este tipo de citas organizan dispositivos especiales en los que ponen todo el empeño para que la prevención y la actuación, cuando es necesario, sea el mejor hilo argumental de ese guión.

La Guardia Civil, responsable de la seguridad marítima, lo escenificaba este miércoles en las aguas del muelle de Zona Franca. Frente al club deportivo Elcano. Allí se realizaba un ejercicio de capacidades dentro de unas jornadas sobre la seguridad de grandes eventos que se están realizando en la nueva escuela del Servicio Marítimo. Y comenzaba la exhibición:

De repente - en este simulacro- una embarcación de recreo pide ayuda. Lanza un SOS porque el patrón ha sufrido un problema de salud y no puede moverse. Está rodeado de cientos de barcos y el peligro por tanto también se extiende a la navegación de todos los demás. Sin embargo, la alarma llega a tiempo y de inmediato se desplazan hacia esta recreativa las patrulleras del Servicio Marítimo. Una de ellas, una paramédica, se aproxima y los agentes saltan al barco. Lo atienden y lo colocan e inmovilizan en una camilla. El helicóptero de Salvamento Marítimo ya está avisado y en minutos les sobrevuela. Lo sujetan y lo elevan. Lo llevarán al hospital más cercano. Ya está a salvo.

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Antonio Vázquez

La Benemérita ha realizado un ejercicio de capacidades con la participación de varias unidades especializadas

La competición continúa (siguiendo con un segundo ejercicio). «Una de nuestras principales labores es garantizar un espacio seguro para que todo pueda desarrollarse sin problemas», explica al micrófono de la 'Río Miño', la patrullera desde se contempla esta prueba. «Por tanto preservar el perímetro de seguridad es básico». Sin embargo, a lo lejos se ve un barco que se aproxima hacia el campo de regatas. Se trata de unos activistas que no tienen la intención de parar. Los agentes se preparan para evitar que entre donde está prohibido. Sigue haciendo caso omiso. Entonces dos lanchas con efectivos del GRS se dirigen hacia la embarcación. Primero le advierten. No cede. Comienza el lanzamiento de pelotas de goma y el posterior abordaje. Es detenido y llevado al puerto más cercano. La actuación no ha durado ni tres minutos. La rapidez es también vital.

Por último se sucede uno de los episodios más temidos en cualquier evento multitudinario: un posible atentado terrorista. Y aunque se vea lejano, «que aquí no pasa», hechos recientes han demostrado que sí puede ocurrir, por tanto, su ensayo, su prevención forman parte de esta formación que debe de ser continua. Un terrorista ha cogido el control del catamarán de la Bahía, va armado y tiene a una rehén. Pero está rodeado. Por aire, dos helicópteros lo mantienen en su mira, por mar, varias patrulleras y lanchas de la Guardia Civil le cercan. Desde el aire un tirador de precisión lo abate. En el agua, las unidades especiales saltan al catamarán y liberan a la rehén sin que haya resultado herida.

En el ejercicio de capacidades celebrado este miércoles en Cádiz y en el que se han podido ver todas estas simulaciones han participado unos 200 agentes de diversas unidades especializadas como el Servicio Marítimo, el Servicio Áereo, Grupo de Reserva y Seguridad (GRS), el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS), los TEDAX, el Servicio Cinológico, o drones, entre otras. Además de la colaboración de Salvamento Marítimo. Y la participación de las patrulleras Río Miño, Río Ulla, Arlanza, Cabaleiro e Irati.