Provincia
Esto no acaba en Algeciras: el campo seguirá alzando la voz
Movilización agricultores
Los representantes agrarios de la provincia se muestran satisfechos con la movilización del jueves pero advierten que continuarán en la calle hasta que sus reivindicaciones cristalicen en acuerdos
Huelga de agricultores en Madrid, en directo: carreteras cortadas y última hora de la manifestación de tractores hoy
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Entre una densa niebla, a primera hora de la mañana del jueves, tanto José Pravia como Miguel Pérez, presidente provincial de ASAJA y secretario de COAG Cádiz, atendían a los medios de comunicación en la explanada de aparcamiento del Circuito de Jerez, uno de los puntos de partida de la movilización de agricultores y ganaderos gaditanos que terminaron bloqueando el Puerto de Algeciras.
Ya a posteriori, ambos representantes agrarios se muestran satisfechos con el desarrollo de la jornada, que movilizó a alrededor de 5.000 personas y que discurrió con normalidad, «pese a algunos intentos muy puntuales de formar altercados de gente que no son del campo y que no lo representan». El principal objetivo era lograr repercusión mediática paralizando uno de los puertos más importantes de Europa y lo lograron.
Esto es simplemente un paso más dentro de un calendario que seguirá su curso mientras agricultores y ganaderos no vean solución a sus reclamaciones, exponen. De momento, el Ministerio de Agricultura ha establecido contactos para convocar mesas de negociación con 18 puntos divididos en cinco bloques, expone Miguel Pérez: «Queremos que esos 18 puntos se afinen mejor y se incluyan algunos otros como la fiscalidad, porque responde a una capacidad contributiva que ahora no tenemos. Además, el Estado recauda mucho IVA porque los costes de producción han subido mucho».
«El Ministerio es consciente de que esto es un movimiento a nivel europeo y que es un malestar generalizado», indica el representante de COAG. «El ministro se tiene que fajar como uno más porque España tiene su peso específico en el sector agrario europeo y hablar de una agricultura europea en crisis es hablar posiblemente de una crisis alimentaria».
José Pravia critica que el ministro Luis Planas se dé por sorprendido con las movilizaciones porque las reivindicaciones vienen ya de lejos: «Tiene que liderar las políticas a nivel nacional y europeo. Tiene que escuchar las reivindicaciones y las que sean justas, llevarlas a cabo. Y si entiende que algunas no lo son, que salga y explique por qué. Nosotros somos gente razonable».
Esta semana, el presidente del Gobierno Pedro Sánchez ha enviado una carta a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, solicitando una revisión de la Política Agraria Común al entender que determinadas cuestiones están muy distantes de lo que es la realidad del campo español y que su aplicación no es viable. Pérez valora el gesto, pero espera que se traduzca también en medidas a nivel nacional: «Es un paso importante y esperamos que no sea flor de un día. Nos parece bien que haya implicación porque esto no es sólo una cosa de Agricultura, toca a otros ministerios como Transición Ecológica, Hacienda o Trabajo».
«Se legisla alejado del campo, desde el despacho y no es algo nuevo. Y a veces se hace con componentes ideológicos y con mantras como el del Medio Ambiente», expone Miguel Pérez. Esto no supone una crítica a la defensa de la naturaleza, al contrario, asegura, «es nuestro medio», pero la agricultura y la ganadería han de ser rentables: «Hay que complementar una actividad agraria que es ancestral, y que ha sabido manejarse en el Medio Ambiente, con una rentabilidad».
Exigen un trato igualitario
Que los productos importados no estén sometidos al mismo nivel de control de estándares que los producidos en Europa es algo que irrita especialmente, de ahí que las protestas se desarrollaran en el Puerto de Algeciras, uno de los principales lugares de entrada de mercancía no europea y que consideran competencia desleal.
«No es entendible que el ministro diga que las cláusulas espejo son una batalla perdida en Europa», afirma el presidente de ASAJA. «No puede ser que nos exijan una serie de restricciones fitosanitarias por salud pública y que vengan productos que utilizan fitosanitarios no permitidos. Es incomprensible», agrega.
Pone además el foco en los controles que se realizan de la mercancía: «¿Por qué no se inspecciona el cien por cien de los buques que llegan si a mí me inspeccionan el cien por cien de los productos que yo entrego en cooperativa y en industria y también en el campo con monitoreo aéreo y control de fitosanitarios?».
Pérez está de acuerdo: «Europa no puede ser hipócrita, no puede exigir a los suyos que sean muy cumplidores con todo y que luego entren aquí productos sin las mínimas garantías». «No queremos ser privilegiados por ser europeos, queremos que nos traten en igualdad y a partir de ahí seguro que somos competitivos», expone respecto a la diferencia de trato con determinadas importaciones que entiende que además tienen un alto coste ambiental por la huella que dejan al venir desde muy lejos.
