Ven a cenar conmigo
De dependienta a «chica Almodóvar»: así ha sido la vida de Loles León
La actriz ha tenido un intenso pasado y ahora es una de las comensales de «Ven a cenar conmigo: gourmet edition»
Loles León (68) se ha convertido en todo un personaje de actualidad gracias a su aparición en «Ven a cenar conmigo: gourmet edition» . De hecho, incluso, muchos seguidores del formato se han mostrado encantados con la idea de que, incluso, se convirtiera en concursante de la séptima edición de «GH VIP», que arrancará en la segunda semana de septiembre.
Ficha completa
Loles León
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Loles León nació en el seno de una familia andaluza de la provincia de Sevilla , pero que emigró a Cataluña . Su padre tenía una churrería ambulante en la playa de la Barceloneta y se dedicaba a ir de pueblo en pueblo buscando las ferias en donde sus delicias fritas fueran degustadas. María Dolores León, como es su nombre completo, ayudaba ya a su padre desde los once años. Con los años, decidió dejar a un lado el negocio familiar y trabajar por cuenta ajena como dependienta en diferentes comercios , como cajera e, incluso, como recepcionista en una elitista tienda de Barcelona.
Sin embargo, aunque entre clientas se desenvolvía brillantemente bien, el sueño de Loles León pasaba por el espectáculo. Entre pequeños grupos de teatro independiente fue cogiendo sus primeras tablas en el mundo de la actuación, e incluso probó suerte en el cabaré de la sala «Cúpula Venus ». Con sus apariciones sobre escena, se metió al bolsillo a los habituales del local, generalmente interpretando el papel de campesina que repartía hortalizas entre el público. En 1983 consiguió dar el salto con su espectáculo «Loles León es Lola» a Madrid, y posteriormente, consiguió mantenerse en cartel con otra interpretación similar, llamada «Loles León es maravillosa».
Aunque tuvo que suspender la función por un problema en sus cuerdas vocales, León se cruzó por el camino con Pedro Almodóvar , que le dio el impulso necesario para convertirla en toda una actriz. El director contó con la actriz para «Mujeres al borde de un ataque de nervios» (1988) y, posteriormente, para «Átame» (1990). Gracias a estos dos papeles, Loles León se ganó el calificativo de «Chica Almodóvar », y por el segundo papel, además, logró su primera nominación a los Goya como Mejor actriz de reparto .
Desde ese momento, el cielo de la interpretación se abrió para Loles León. Rodó infinidad de cintas, como «Don Juan, mi querido fantasma» (1990), «Yo soy esa» (1990) de la mano de Isabel Pantoja o «Libertarias» (1996), con Ana Belén, papel con el cual volvió a recibir la nominación a los premios de la Academia del Cine y múltiples reconocimientos internacionales.
Sin embargo, tal y como reconoció, tenía una pequeña espina clavada: tener un papel creado en exclusiva para ella. Por suerte, Yolanda García Serrano y Juan Luis Iborra confiaron en ella para hacer el gran papel protagonista de «Amor de hombre» (1997), un papel que le funcionó como anillo al dedo. Al año siguiente, interpretaría también un destacado papel en «La niña de tus ojos» (1998), de Fernando Trueba, en donde compartió cartel con Penélope Cruz y Antonio Resines . Por su papel en la cinta de Trueba, León logró su última nominación a los Goya hasta la fecha.
Pero, sin duda, uno de los papeles que más le ha marcado a León ha sido el que hizo en televisión de la mano de la serie «Aquí no hay quién viva» . Sus apariciones eran muy aplaudidas por los espectadores, pero su relación con esta ficción duro tan solo un año. En 2004 decidió abandonar la serie por su elevada exigencia. Desde ese momento, Loles León ha ido apareciendo en diferentes series de televisión y películas, aunque no con tanto éxito como el logrado con su personaje de Paloma Cuesta.
Por ello, doce años después de dejar atrás la ficción de Antena 3, regresó a su hermana gemela, en Telecinco: «La que se avecina» . En la actualidad, Loles León interpreta a Menchu, madre de Yoli (Miren Ibarguren) y que, durante un tiempo, se convierte en suegra de Amador (Pablo Chiapella).
Pero Loles León todavía esconde muchos secretos. De hecho, gracias a su aparición en «Ven a cenar conmigo: gourmet edition» se han descubierto algunos detalles sobre su pasado. Uno de los momentos más delicados, confiesa, es cuando se convirtió en madre en la década de los 70. En aquella época decidió ser madre soltera , y la sociedad no estaba preparada para acogerla como actriz en dichas condiciones: «Fue muy difícil» , recuerda, vivir momentos como tener que llevar al pequeño a los rodajes. Aunque también recuerda con dolor cuando su retoño fue rechazado en un colegio público por ser hijo de una madre soltera.
Otro de los detalles que ha contado han sido las atrevidas experiencias sexuales que ha vivido . Desde la primera entrega, en casa de Irma Soriano, Loles León desvelaba que le gustan las orgías. Al observar la cama de matrimonio de Soriano, Rosa Benito se preguntaba del por qué de su gran tamaño, a lo que la actriz respondía con un «en esta cama caben unos cuantos, podemos hacer una orgía» , dejando sin palabras a la excolaboradora de «Sálvame».
«Es lo que se llama un poquito de orgía, varias personas. A mí me molan. Mira la piel como se te mantiene» , decía señalando Loles León su cutis. Y es que la actriz no se corta ni un pelo. «Tendrías que hacer una cama redonda. Expandes el cerebro, los sentidos, las feromonas... hay que probarlo, cariño . Tenemos solo una vida. Yo lo he hecho de joven, pero ahora no porque no me sale, pero yo no estoy cerrada a todo lo que me de placer, y no me da corte», le recomendaba a Rosa Benito, que no sabía dónde meterse.
A pesar de las reticencias de Benito a celebrar la fiesta sexual por considerarse «antigua», la actriz continuó insistiendo: «No, tu mente está paralizada en una época, pero tienes que sacarla de ahí. Solo tienes que proponértelo, y el que busca, encuentra. Siempre. Mira que en una cama redonda haces más que un gimnasio , porque ahí tienes que trabajar mucho».
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