Venganza sin límites

Michael Mitchell es el típico padre modelo hasta que, un día, su hijo Chase muere en un tiroteo. El duelo de Michael se convierte en ira cuando a los asesinos del pequeño sólo les cae una pequeña condena. Michael decide entonces cometer un delito para poder entrar en la cárcel y, de esta manera, vengar personalmente a su hijo.

Preston A. Whitmore II, responsable de otros dramas carcelarios como “Crimen sangriento” o “Prisión sin ley”, es el director, guionista y coproductor de esta película. Boris Kodjoe (“Brown Sugar”), especialista en papeles de pandillero y chico duro, interpreta esta vez a un personaje torturado en las antípodas de su registro habitual.