Paparazzi

Bo Laramie, una superestrella, parece tenerlo todo en la vida: una bella esposa, un hijo adorable y una casa en la playa de Malibú. Pero su fama tiene un precio: es el objetivo de un equipo de cuatro 'paparazzi', encabezados por Rex Harper. Los reporteros persiguen y espían a Bo y su familia, haciéndoles la vida imposible.

Cansado de la persecución constante a la que le sometían los periodistas del corazón, Mel Gibson decidió vengarse de manera artística de ellos. Para ello, encargó "Paparazzi" a un director debutante en el celuloide, Paul Abascal (que hasta entonces había trabajado en el departamento de maquillaje de películas como "Demolition man" o "Juez Dredd" y sus únicas experiencias como realizador se habían limitado a episodios de series como "Sentinel").

A pesar de contar con breves apariciones del mismísimo Gibson, Chris Rock, Vince Vaughn y Mathew McConaughey, y de tener un reparto encabezado por actores de cierta fama como Cole Hauser ("La guerra de Hart") y Robin Tunney ("Límite vertical"), acabaron pesando más sus defectos (argumento maniqueo y estética de telefilme) y la cinta se convirtió en un estrepitoso fracaso tanto comercial como artístico.