Brazil

Sam es un tímido funcionario de un Estado caracterizado por una obsoleta burocracia y por ejercer un rígido control sobre sus ciudadanos. Pero todo cambia para él, que no tomaba muy en serio esta opresiva realidad, cuando conoce a un terrorista llamado Tuttle y a Jill, una bella camionera. Por ella llega a subvertir los mecanismos de recogida de información del Estado, hasta que su omnipresente brazo le atrapa y le condena a la cámara de tortura.

Primera película de Terry Gilliam dirigida sin el concurso de los Monty Python, en la que el director americano plasmó su peculiar mundo propio. Después de filmes como "Los caballeros de la mesa cuadrada y sus locos seguidores" o "La vida de Brian", Gilliam plantea una película con referentes a Kafka y Orwell, y en la que crea un ambiente malsano y de opresión del ciudadano.

Parece ser que la Universal no quiso distribuirla en los Estados Unidos, hasta que Gilliam consiguió que la crítica (pese a no haberse estrenado) la considerase la mejor película del año. Por esa razón, la carrera de Gilliam como director pudo continuar, con películas como "El rey pescador" o "Doce Monos", entre otras.