'Sinjar', el drama del terrorismo islámico contado por una superviviente real

La nueva película de Anna M. Bofarull cuenta en su reparto con Nora Navas y Luisa Gavasa

Halima Ilter, una de las protagonistas de 'Sinjar'

Javier Navío

En el año 2014, la región de Sinjar (situada en el Kurdistán iraquí) , fue el escenario de una terrible masacre en la que el Estado Islámico asesinó a más de 3000 Yazidíes y capturó a otros 6000, entre ellas muchas mujeres que fueron usadas como esclavas sexuales. Aquel suceso sacudió la conciencia de la directora Anna M. Bofarull (Tarragona, 1979), que sintió de manera inmediata la necesidad de llevar esa historia a la pantalla. « Me conmocionó pensar que eso le estuviera ocurriendo a mujeres coetáneas en otros lugares del mundo. De alguna manera quería ver lo que eso significaba, cómo era el día a día de esas mujeres, desde la intimidad. Así que empecé a investigar y rápidamente también quedé fascinada por esas mujeres guerrilleras que lo han perdido todo y cogen un arma y se van a defender lo poco que les queda», afirma la directora.

En 2016, Bofarull visitó varios campos de refugiados en Irak y estuvo entrevistando a mujeres que habían conseguido escapar del Estado islámico. «En ese momento ya estaba escribiendo el guion y estas mujeres me iban aportando mucho detalles sobre esa intimidad tan dura. Ahí fue un poco donde nació mi compromiso claro de que esta película había que hacerla porque era necesario hablar de esa realidad. También estuve conviviendo con las mujeres guerrilleras, viendo cómo era su día a día. Y, durante todo esto proceso, descubrí también a las madres occidentales con hijos que desaparecen de un día para otro porque se marchan a hacer la Yihad. Estuve haciendo muchas entrevistas, leyendo mucho sobre lo que padecen esas mujeres y me parecía fascinante sobre todo por la proximidad», recuerda Bofarull.

En 'Sinjar' (estreno el 1 de julio), Anna M. Bofarull decide abordar el drama de las víctimas del terrorismo islámico a través de las historias de tres mujeres. Por un lado está Hadia ( Halima Ilter ), una mujer que es obligada a vivir como esclava junto a sus tres hijos. Por el otro está Carlota ( Nora Novas ), una enfermera catalana que intenta buscar a su hijo después de que este decida huir de casa para alistarse en el ISIS. La tercera protagonista es Arjin, una joven que consigue escapar de su cautiverio y decide unirse a las milicias kurdas. El personaje de Arjin está interpretado por Iman Ido Koro , una superviviente real que fue secuestrada con 9 años y logró escapar cuatro años más tarde tras haber sido casada y vendida en varias ocasiones. Así recuerda Bofarull el momento en el que dio con ella: «En uno de los viajes para localizar y buscar personajes secundarios, conocí a un grupo de mujeres supervivientes y entre ellas estaba Iman. Eran todas chicas muy jóvenes y realmente me planteé el hecho de si era necesario darles directamente la presencia en la película. Hablando mucho con ella y viendo cómo daba delante de la cámara, consideré que tenía que interpretar a ese personaje que en el fondo es de ficción pero que tiene tanto de su pasado que al final es como si estuviera interpretándose a sí misma».

Un rodaje lleno de desafíos

El trabajo con Iman fue uno de los grandes retos de la película: «Fue difícil porque tenía el reto de contar lo que le ha pasado a ella y a muchas mujeres de su comunidad. La ventaja es que éramos un equipo mínimo formado íntegramente por mujeres así que supimos crear una intimidad muy importante. Se creó una relación más personal que profesional y se generó la confianza necesaria para que pudiera abrirse delante de la cámara sabiendo que la respetábamos y que éramos muy cuidadosas con su vulnerabilidad». La joven salió por primera vez de su país para presentar la película en el Festival de Málaga. «Fue una experiencia muy bonita porque realmente se dio cuenta de que al contar su historia en primera persona, estaba transmitiendo de manera poderosa el dolor que sufre toda esa generación de mujeres yazidíes. En ese momento fue consciente de que todo ese esfuerzo y trabajo había tenido sentido», asegura la realizadora.

Bofarull recuerda el rodaje como el mayor desafío de su carrera: «Rodar en Kurdistán con un presupuesto pequeño es complicado porque tienes que ir solucionando muchas cosas en el día a día: localizaciones que se van cayendo, actores que al final deciden no salir, castings de última hora... Además, empezamos a rodar en febrero de 2020, por lo que nos pilló de pleno la pandemia. Eso significó que algunos actores que venían desde España no pudieron llegar, así que tuvimos que buscar actores locales. Durante la última semana, tanto los miembros del equipo técnico como el reparto nos tuvimos que confinar en la misma casa en la que rodábamos. Cuando quisimos volver a España, el aeropuerto estaba cerrado, así que nos acabaron repatriando las fuerzas aéreas».

En el reparto también se encuentra Luisa Gavasa , que encarna a la abuela del joven español que decide unirse al ISIS. La ganadora del Goya por 'La novia' quería «aportar mi granito de arena en esta película que es un grito ante la barbarie y el fanatismo». Sobre el trabajo de Anna M. Bofarull destaca «su tenacidad absoluta. Ha sido muy valiente al arriesgarse a rodar allí. Tanto la productora Marian Matachana como Anna han invertido siete años de su vida para sacar el proyecto adelante». Gavasa considera que el principal mensaje que lanza la película es que «hay que seguir luchando contra el fanatismo. Las armas siempre deberían ser el último recurso para defenderse pero, en este caso, entiendes perfectamente que las chicas las acaben empuñando, Yo también lo haría si me veo en una situación como esa, en la que se han hecho con mi cuerpo, con mi vida y con mi familia». La actriz aragonesa, que recientemente participó en las elecciones a la presidencia de la Academia, muestra preocupación por la nueva ley audiovisual . «Nos han hecho un flaco favor. Los académicos estamos absolutamente en contra de esa ley porque no beneficia al cine independiente y en España la mayoría de las películas son muy pequeñas, como 'Sinjar'. No sé qué intereses ha habido por en medio pero lo que está claro es que no nos beneficia ni nos ayuda», asegura.

'Sinjar' llega a los cines el 1 de julio.

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