Luis Tosar: «Los actores de antes eran estrellas, estaban endiosados»
Con tres «cabezones» en su currículum, el que más de los nominados a mejor actor, se enfrenta a Antonio Banderas, Karra Elejalde y Antonio de la Torre
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La rueda de Luis Tosar (Lugo, 1971) no deja de girar ni cuando él se baja. Es imposible imaginar un año de cine español sin una película suya ni una gala de los Goya sin su presencia como nominado. Este año compite a mejor actor con tres titanes - Antonio Banderas («Dolor y gloria»), Antonio de la Torre («La trinchera infinita») y Karra Elejalde («Mientras dure la guerra») -, pero él es el que más «cabezones» suma, tres. Además de su nominación por «Quien a hierro mata», protagoniza «Intemperie», que opta a mejor película, y ya está de nuevo en la rueda de los títulos que le podrán traer a los Goya en 2021. Entre ellos, « Adú » o « Way Down ».
-¿Cómo ha visto la cosecha este año?
-Tengo la sensación de que está por encima de la media, sobre todo porque todas son películas con mucha identidad. Hay poca fórmula, poco producto. Estamos ante una cosecha muy autoral que me encanta.
-¿El público se reencuentra con su cine cuando hay historias así?
-Soy padre «full time» y voy poco al cine, no sé si puedo hacer muchos análisis, pero tengo esa sensación.
-Va a ir a la gala de los Goya en mitad de la promoción de «Adú» y con su labor de padre «total». ¿Qué gana entre todos esos trabajos?
-Gana el padre por goleada (risas). Evidentemente, en la carrera de los premios ya no puedes hacer nada, la gente ya habrá votado, por lo que ya no le dedico ningún esfuerzo.
-Viendo la lista de intérpretes nominados, parece un «all star» del cine español. ¿Cómo se ve?
-Pues mal, qué quiere que le diga, está mal la cosa (risas). Pero muy orgulloso de estar ahí, hay mucho nivel y mola ser una parte de eso…
-¿No se ve con opciones?
-No me veo, no. La verdad… Y suelo acertar con todos, no solo conmigo.
-¿Cómo vive no parar de trabajar en una profesión en la que siempre está el miedo de que le dejen de llamar?
-Hace un par de años tuve que parar obligatoriamente siete meses y la verdad no me hizo ninguna gracia. Y dije: a partir de ahora, voy a empezar a medir a lo que digo sí y en qué condiciones. Y ahora estoy trabajando un montón… Porque dije que sí a un montón de cosas (risas).
-¿Qué hay de esa mística de los actores?
-La gente cree que hacemos un viaje espiritual, pero hay cosas que son de pura sugestión. Me refiero: hay ochenta personas mirando, no puedes tener ninguna intimidad en el set. Lo que pasa es que creo que es herencia de discursos pasados, cuando también los actores eran otra cosa, eran estrellas, estaban muy endiosados. Se ha ido normalizando.
-¿La nominación de Banderas demuestra que se puede triunfar en los Oscar con una cinta española?
-Tienes más boletos si te dirige Almodóvar. Ambos llevan muchos años trabajando y consiguiendo éxitos, y eso no es casual.
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