Empleados de la película de Baldwin ya habían denunciado irregularidades: «Llevamos tres descargas accidentales»
Aparentemente, la producción tenía problemas de presupuesto y no pudo contratar a un armero profesional para hacerse cargo de las armas del rodaje
Horas antes de que el actor Alec Baldwin le disparara fatalmente a la directora de fotografía con una pistola de atrezo en el set de 'Rust' en Nuevo México, media docena de trabajadores del equipo de cámara se retiraron del rodaje para protestar por las condiciones laborales. Los camarógrafos y sus asistentes abandonaron la filmación frustrados por las condiciones en las que se veían obligados a trabajar: largas horas sin descanso, desplazamientos a grandes distancias para alojarse y falta de pago en las últimas semanas. Todos ellos fueron sustituidos por otro grupo de trabajadores no sindicalizados. Enfadados con el accidente, varios han sido los miembros de la unión que han hablado en sus redes sociales o con medios de comunicación como el 'LA Times' o la revista 'Variety'.
Según estos empleados, durante la producción de 'Rust' no se siguieron ni los protocolos de seguridad estándar en la industria, ni de sanidad por Covid. Entre los miembros del equipo que se quejaron la semana pasada, destaca el asistente de operación de las cámaras que trabajaba mano a mano con la directora de fotografía Halyna Hutchins, muerta accidentalmente durante un ensayo del rodaje. Tres miembros del rodaje que no estuvieron presentes en el set del Rancho de Bonanza Creek en ese momento, dijeron que el sábado pasado las armas del rodaje sufrieron dos descargas accidentales. El doble de Baldwin disparó accidentalmente dos rondas después de que le dijeran que el arma estaba ‘fría’, jerga con la que se reconoce un arma sin municiones.
«Deberían haber hecho una investigación y no hubo ni reuniones de seguridad. No había garantías de que no volvería a suceder . Todo lo que querían hacer era apresurarse, apresurarse, apresurarse». Otro de los miembros del equipo quedó tan alarmado por los fallos de las armas de atrezo que envió un mensaje de texto al gerente de producción. « Llevamos tres descargas accidentales. Esto es muy inseguro». Ante la enorme cantidad de mensajes que han ido surgiendo en las horas posteriores al accidente, la productora de la cinta emitió un comunicado. «La seguridad de nuestro elenco y equipo es la máxima prioridad de Rust Productions y de todos los asociados con la empresa realizaremos una revisión interna de nuestros procedimientos mientras se cierra la producción. Continuaremos cooperando con las autoridades de Santa Fe en su investigación y ofreciendo servicios de salud mental al elenco y al equipo durante este trágico momento».
La tragedia en un ensayo previo a una escena
La tragedia ocurrió el jueves por la tarde durante el ensayo de un tiroteo que debía comenzar en la zona de la iglesia, desde donde el personaje de Baldwin salía en una secuencia exterior a corta distancia.
Hutchins estaba acurrucada alrededor de un monitor organizando su siguiente toma de cámara cuando Baldwin la mató accidentalmente. El actor se estaba preparando para filmar la escena en la que sacaba la pistola de una funda y los miembros del equipo ya habían gritado «pistola fría» en el plató de Nuevo México cuando se escapó el fatídico disparo. El equipo de producción de las cámaras estaba midiendo los ángulos y aún no se habían retirado al área de seguridad que se establece en un rodaje cuando se dispara un arma. En cambio, el operador de la cámara B estaba en una plataforma rodante con un monitor, comprobando las posibles tomas, Hutchins a su lado mirando el monitor por encima del hombro del operador, al igual que el director de la película, Joel Souza, que estaba agachado justo detrás de ella. Cuando Baldwin sacó el arma de la funda, la munición voló hacia el trío alrededor del monitor. El proyectil pasó silbando por el operador de la cámara, pero penetró a Hutchins cerca de su hombro, luego continuó hasta Souza. Hutchins inmediatamente cayó al suelo y fue atendida inmediatamente por el médico del rodaje aplicando presión sobre su herida en un intento de detener la hemorragia.
En la llamada a la policía, publicada por la página TMZ, se puede escuchar a la Supervisora de guión gritar a un miembro del equipo por su falta de cuidado y decir en el auricular. «Necesitamos ayuda de inmediato». El operador pregunta si se disparó una bala real del arma, pero la persona que llama no sabe qué tipo de proyectil se ha disparado. Finalmente, un hombre se hace cargo de la llamada y le hace saber al operador que ambas personas están despiertas y que un médico los está atendiendo. Hutchins, de 42 años, murió en el hospital horas después de ser trasladada en avión y el director Joel Souza también herido fue dado de alta del hospital.
Baldwin emitió un comunicado el viernes, diciendo: « No hay palabras para expresar mi conmoción y tristeza con respecto al trágico accidente que se llevó la vida de Halyna Hutchins, esposa, madre y colega nuestra profundamente admirada. Estoy cooperando plenamente con la policía. investigación para abordar cómo ocurrió esta tragedia Estoy en contacto con su esposo, ofreciéndole mi apoyo a él ya su familia. Mi corazón está roto por su esposo, su hijo y todos los que conocieron y amaron a Halyna». El marido de Halyna, Matthew, también ofreció una breve declaración a la prensa. «No creo que haya palabras para comunicar la situación en la que estamos. Estoy en comunicación con Alec Baldwin». Halyna deja un niño de 8 años.
Aparentemente, la producción tenía problemas de presupuesto y no pudo contratar a un armero profesional para hacerse cargo de las armas del rodaje, en su lugar contrataron a una mujer sin experiencia, pero con licencia de armas, y tres estudiantes de cine como asistentes. Ante esta tragedia, el productor Jonathan Nolan anunció que en ninguna de sus producciones se volverá a disparar armas y empezó hoy mismo con Westworld, que se rueda en Texas, donde ya no se utilizaran armas en la filmación. Otros, como el rodaje de Killing Eve, escribieron en su claqueta #ForHalyna, en un esfuerzo por exigir rodajes en mejores condiciones para sus empleados.
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