Brendan Fraser no asiste a los Globos de Oro por los abusos que sufrió: «Me convertí en un recluso»

Brendan Fraser es el gran favorito para llevarse el Globo de Oro como mejor actor por su aplaudida actuación en 'La ballena (The Whale)'. Gane o no, lo único seguro es que no recogerá su premio. El actor, famoso por películas como 'La momia' y 'Dioses y monstruos', ha recordado un suceso de su pasado, del que ya habló en 2018 , que le impide ir a la gala de forma categórica. Fraser, de 53 años, es también favorito en los Oscar. En el festival de Venecia recibió entre lágrimas una ovación de seis minutos tras la proyección de la película.

Solo él sabe lo que ha sufrido hasta conseguir este gran triunfo interpretativo, para el que además tuvo que engordar hasta los 300 kilos. En su preparación, llegó a hacerse socio de la Coalición de Obesos en Acción para entender la presión mental a la que se ven sometidos. «Esta puede ser la primera y la última vez que haga esto para un personaje, por eso lo he dado todo», aseguró.

Austin Butler, Hugh Jackman, Bill Nighy y Jeremy Pope son sus rivales en los Globos de Oro, que se celebran esta madrugada , pero su verdadero enemigo es Philip Berk , antiguo presidente de la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA), entidad que organiza los premios.

Los galardones sufren su propia polémica , una amenaza que podría llevarlos a la desaparición, pero el problema de Fraser es personal. Según denunció 15 años después de los hechos, Berk abusó de él en un evento. «Su mano izquierda se extiende, me agarra la nalga y uno de sus dedos me toca en el perineo. Y empieza a moverlo. Me sentí como un niño pequeño . Sentía como si tuviera una pelota en la garganta. Pensé que iba a llorar. Salí corriendo, me fui a mi casa y le conté a mi mujer lo que había pasado. Sentía como si me hubieran echado pintura invisible por encima», contó el actor.

La depresión lo llevó a dejar de trabajar. «Aquella experiencia me hizo retraerme, me convertí en un recluso». Siempre según la versión de Brendan Fraser, la asociación se negó a investigar e intentó tapar el caso, además de convencer a ambos para que firmaran un acuerdo, según el cual todo había sido una broma. Pese a la gravedad de las acusaciones, Berk permaneció en la Asociación hasta el año pasado y solo fue expulsado gracias a que se descubrió un correo electrónico en el que describía el movimiento Black Lives Matter como «un grupo de odio racista».

Ahora, Fraser es consecuente y no quiere saber nada de los premios. «No participaré. Tengo más historia que respeto por la Asociación de Prensa Extranjera de Hollywood y mi madre no educó a un hipócrita . Puedes llamarme un montón de cosas, pero no eso», declaró Fraser, que ha encontrado su redención con la película dirigida por Darren Aronofsky .