SACERDOTE. Juan Luis Roquete defendió el valor de la iconografía religiosa del Oratorio. / O. C.
CÁDIZ

Otro debate defiende a ultranza el valor del Oratorio como templo

Un experto en iconografía lo vincula a la figura de la Inmaculada Concepción

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El salón de actos del Casino de Cádiz fue ayer el escenario de una conferencia y posterior debate en el que uno de los mayores expertos en la iconografía del Oratorio de San Felipe, el sacerdote Juan Luis Roquete, defendió el valor del patrimonio histórico de esta institución. Roquete definió este patrimonio como uno de los aspectos «menos conocidos» del Oratorio y lo vinculó a la figura de la Inmaculada Concepción.

Roquete, miembro del Archivo Diocesano y de la comisión diocesana de Patrimonio Histórico Artístico, señaló que en el Oratorio confluyen cuatro hechos: el socio educativo, el socio religioso, el eclesial-político-constitucionalista y el plástico, artístico y religioso. Éste último es uno de «los grandes desconocidos» según Roquete, que defendió que sea más divulgado para mejorar su protección. El sacerdote ha expresado en diversos artículos la necesidad de mantener el carácter sacro de la institución y en la conferencia hizo especial mención a la creación del Oratorio, que tuvo un marcado carácter religioso al estar fundado en la devoción a la Inmaculada Concepción.

En el comienzo de su exposición, Roquete explicó que la construcción de la capilla cuenta con una importante significación teológica, al haber coincidido con el final de siglo inmaculista. «El templo se proyectó seis años después de la creación del cuadro de Murillo sobre la Inmaculada y en torno a él», reveló, al tiempo que señaló que es un buen ejemplo de un cierto tipo de recreación del mesianismo. «El mesianismo ha contado durante la historia con numerosos tipos de recreación», aclaró.

Roquete, además de su formación como sacerdote e historiador, fue monaguillo en la institución y vivía en la misma manzana del San Felipe Neri, donde cursó sus estudios, una circunstancia que fue resaltada por el presentador del acto. Gaditano, nacido el 27 del febrero de 1946, este sacerdote ha estado vinculado desde siempre a la iglesia de Chiclana y al Archivo Diocesano, y es uno de los mayores expertos de la provincia en la iconografía del Oratorio. Está preparando un libro sobre este tema, que podría ver la luz coincidiendo con el segundo centenario de la Constitución de 1812.

Antes de la conferencia, a la que asistió numeroso público, el presentador del acto aseguró que los cristianos «deben hacer bandera y defender el mantenimiento del carácter sagrado del Oratorio» y añadió que «la última palabra» del Obispado ha sido que este aspecto no se ha negociado.