El PSOE presta a IU 16 votos para que esté presente en el debate del Estatuto

En una decisión insólita, 16 de los 61 parlamentarios del PSOE votaron ayer a favor de una candidata de IU. Ninguno de ellos será multado por romper la disciplina de partido. Se trató de un gesto meditado e ideado con un fin claro: Disipar cualquier duda sobre qué tres grupos representarán al Parlamento andaluz en el debate de toma en consideración de la proposición de Ley de la Reforma de Estatuto de Andalucía, que se celebrará el próximo día 23 en el Congreso. La cifra de 16

Esta responsabilidad recaerá en Manuel Gracia y Concha Caballero, portavoces parlamentarios de PSOE e IU, respectivamente, -únicos grupos que han apoyado el nuevo articulado andaluz- y el popular Antonio Sanz. Caballero abrirá el debate en Madrid y lo cerrará Gracia, pero entre ambos hablará el representante del PP que ya ha anunciado que explicará la postura contraria de su grupo a la redacción pactada por las dos coaliciones de izquierda, aunque no adelantó cuál será el sentido de su voto -negativo o abstención-.

Lo qui hizo ayer el PSOE fue lanzar un 'ataque preventivo' ante la posibilidad de que el PP hiciera un movimiento similar que permitiera la presencia del PA en la terna que hablará en Madrid, en detrimento de IU. La cifra de 16 no fue escogida al azar. Sumados a los seis de IU, se alcanza un total de 22, número que no podía superar el PA, aunque el PP le cediese algunos de los suyos. A tenor del resultado de ayer, este trasvase de votos de PSOE a IU no hubiera sido necesario, ya que la candidatura de Pilar González sólo tuvo el apoyo de los cinco miembros del PA -IU tiene seis diputados-.

Tres representantes

El sistema elegido ayer fue el de votación secreta en urna, por llamamiento del secretario del Parlamento. Manuel Gracia obtuvo 45 votos; Antonio Sanz, 35, Concha Caballero, 22 y el PA, cinco -nadie del PP le apoyó-.

Con anterior a este sufragio, la Cámara andaluza había aprobado por abrumadora mayoría designar a tres representantes para el mencionado debate -sólo votó en contra el PA-. Cabía la opción de que sólo se designase a un único representante, pero el PSOE optó por la fórmula de tres para dar cabida a IU, su único aliado durante el trámite de ponencia en Andalucía -lo que le ha abierto la puerta al PP-.

Las reacciones de los cuatro portavoces parlamentarios abundaron en las posiciones ya conocidas. Manuel Gracia reiteró que el PSOE nunca ha querido impedir que el PP acuda al Congreso, aunque insiste que los populares tendrán que dar explicaciones al pueblo por ir a Madrid a votar en contra de una decisión soberana del Parlamento andaluz. El popular Antonio Sanz indicó que la votación de ayer demuestra que en Andalucía existe un «bipartito» y que IU ha vuelto a ser rehén de su pérdida de identidad.

Concha Caballero, por su parte, insistió en que será un honor defender un Estatuto que otorga a los andaluces competencias máximas y más derechos.

La andalucista Pilar González fue la más dura: «Se ha demostrado que votar al PSOE o a IU es lo mismo, porque luego compadrean y se regalan votos entre ambas formaciones».