ESPECIALISTA. Beckham se dispone a ensayar lanzamientos de falta junto a Julio Baptista. / EFE
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Beckham, más motivado que nunca tras su suplencia el pasado domingo

López Caro le pasó factura por disputar un partido lesionado y el inglés ha captado el mensaje brillando en los entrenos Cicinho, su sustituto, se siente cómodo jugando de extremo

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David Beckham , centrocampista inglés del Real Madrid, destacó en el entrenamiento de ayer por su concentración y los cinco goles que marcó, extramotivado tras su sorprendente suplencia del domingo ante el Getafe (1-1).

Beckham, totalmente recuperado de las molestias que le impidieron jugar ante la Real Sociedad, recibió en Getafe el castigo del entrenador Juan Ramón López Caro, que le pasó factura por disputar un partido decisivo lesionado sin pedir el cambio, por segunda vez esta temporada.

El técnico madridista dejó entrever en la rueda de prensa posterior al empate de ayer en Getafe que la suplencia de Beckham era un mensaje directo a su jugador. Parece que el inglés lo ha captado y ayer brilló especialmente en el entrenamiento de La Ciudad Real Madrid. Hasta cinco goles marcó en los partidos a mitad de campo, en los que, sin sonreír ni un segundo ni entrar en las bromas que compartían Raúl, Robinho, Casillas y Sergio Ramos, ofreció un recital de disparos con la pierna derecha.

De nuevo un gesto, como el del domingo cuando no ofreció su habitual aplauso a los aficionados madridistas desplazados, delató su enfado.

Al final de la sesión de trabajo, cuando se encaminaba hacia los vestuarios con cara de pocos amigos, cogió un balón y lo lanzó con toda su fuerza hacia el cielo y lo mandó a un campo anexo.

En su momento más difícil de la temporada, Beckham recibió la visita de su mujer, Victoria, que presenció el entrenamiento desde el sitio reservado a familiares y amigos de los jugadores, y abandonó de la mano de su marido la Ciudad Real Madrid, con el inglés saludando con simpatía a los medios y mostrando ante todos su caballerosidad al abrir la puerta derecha del coche a su acompañante.

Sin suerte

Cicinho, su sustituto ante el Getafe reconoció la tristeza que siente el vestuario tras sumar en Getafe el sexto empate en los últimos siete partidos, y afirmó que «la suerte no está de lado» madridista. El brasileño no ocultó que su nueva posición se siente más cómodo. «No me perjudica jugar de extremo, pero siempre dejé muy claro que juego de latera», admitió.

El jugador brasileño admitió que junto a sus compañeros sabe que el Real Madrid puede rendir mucho más y lograr mejores resultados para intentar acabar segundo en Liga. «Todos sentimos que podemos dar algo más. Tenemos condiciones para ello y lo buscamos. Todo el mundo ve que estamos corriendo mucho pero que la victoria no llega», manifestó.