Un tercer detenido por la trama de las facturas falsas sigue en prisión

Finalmente son tres los detenidos por el fraude de las facturas falsas que permanecen en prisión preventiva en Puerto II. Según pudo saber este medio, a Carlos Carretero, el presunto cabecilla de esta trama y también supuestamente responsable de la red que falsificaba informes médicos para conseguir pensiones de invalidez, le acompaña en el módulo de Ingresos un comerciante, que responde a las iniciales de M. C.

Al igual que Carretero, este empresario fue arrestado por la Guardia Civil en la operación Halcón, emprendida por la Agencia Tributaria para desmantelar el entramado que operaba desde la Sierra y que se dedicaba a manipular facturas para cobrar el IVA de manera fraudulenta. Buena parte de los casos se detectaron en operaciones de compra-venta relacionadas con el sector de la piel y los productos de marroquinería.

Entre las detenciones practicadas la semana pasada se encuentra la de este empresario, M. C, que permanece aislado del resto de reclusos mientras continúan las diligencias judiciales, a cargo del juzgado número 2 de Instrucción de Jerez. Según las fuentes consultadas, al igual que el ex jefe de la Policía Local de Ubrique, Carlos Carretero, el comerciante salió en varias ocasiones del recinto carcelario para declarar y también recibió varias visitas de su abogado.

Precisamente, el pasado jueves los letrados de todos los detenidos en relación a este asunto, y también al fraude de las pensiones descubierto en la operación Karlos, se entrevistaron con sus defendidos. Al parecer, se trata de la tendencia habitual antes de un fin de semana o de un largo puente festivo como el actual.

Lo que está claro es que Carretero y otro de los presuntos responsables del fraude de las pensiones, el inspector médico de la Unidad de Incapacidades de Cádiz, Francisco Casto, comparten estancia en el módulo de Ingresos.

Aunque en principio se aseguró que el ex jefe de la Policía Local de Ubrique permanecería incomunicado para evitar contactos con el otro encarcelado tras la operación Karlos, lo cierto es que el aislamiento sólo se refiere del resto de internos.

De hecho, las fuentes consultadas insisten en que Carretero y Casto salen juntos al patio y pueden perfectamente conversar desde sus respectivas celdas, ya que no existen medidas excepcionales de aislamiento en el módulo de Ingresos ni tampoco ha constancia de órdenes expresas de incomunicación.