Hamás lanza un mensaje de distensión a Israel antes de las elecciones del martes

En un simbólico llamamiento a los israelíes de cara a los comicios del martes, el nuevo primer ministro palestino, Ismail Haniyeh, ha declarado hoy que el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) quiere poner fin a la crisis con Israel. "No buscamos un remolino de sangre en esta región", ha afirmado Haniyeh. "Queremos derechos y dignidad para este pueblo (palestino), y poner fin a esta situación complicada desde hace décadas".

La victoria de Hamás en las parlamentarias palestinas del pasado 25 de enero ha arrojado más tensiones a las relaciones entre israelíes y palestinos. Desde entonces, las autoridades israelíes han cortado la transferencia de millones de dólares de impuestos a la Autoridad Palestina, y han amenazado con acabar con todas las relaciones cuando el Gobierno asuma sus funciones. Sin embargo, Haniyeh ha señalado que la elección del movimiento de resistencia no ha profundizado la crisis. "La presencia de Hamás en el poder es el comienzo para resolver la crisis, si quieren", ha señalado.

El primer ministro no se ha pronunciado respecto a qué partido israelí de los que concurren el martes a las urnas en Israel considera que es la mejor opción para los palestinos, aunque sí ha señalado que la intención del partido Kadima -dirigido por el primer ministro en funciones, Ehud Olmert, y en cabeza en todas las encuestas- de retirarse de algunas zonas de Cisjordania de manera unilateral, sin acuerdo con los palestinos, es inaceptable. Asimismo, preguntado por si Hamás iniciará negociaciones con Israel, Haniyeh mantiene que el problema no recae en sus manos. "El problema es con Olmert, con el Kadima. Dijo que no tendría ningún contacto con el Gobierno palestino. Anunció una posición. El problema no es con nosotros", ha agregado.