Los vecinos de Gallineras suspenden la manifestación prevista para mañana

La reunión mantenida ayer entre el delegado de Urbanismo, Fernando Rodríguez, y representantes de los habitantes de Gallineras y San Onofre y de la Federación de Asociaciones de Vecinos Isla de León para tratar el futuro proceso de regeneración de la zona contemplado en el próximo Plan General de Ordenación Urbana -Pgou- finalizó con conclusiones positivas para ambas partes.

Delegado y vecinos coincidieron en señalar la existencia de un acercamiento de pareceres que alejan los rumores de derribos y expropiaciones y acercan cada vez más la consecución de próximos acuerdos entre la Gerencia de Urbanismo y los de Gallineras y San Onofre.

El nacimiento de un nuevo clima de diálogo hacia la búsqueda del consenso entre los implicados ha animado al colectivo vecinal a anular el primer acto contemplado en su calendario de manifestaciones. De esta forma, queda desconvocada la movilización fijada para mañana sábado en Gallineras, en la que hubieran tomado parte las más de 300 familias afectadas. Este hecho, aunque no implica la retirada de la manifestación prevista para el próximo día 25, supone un voto de confianza hacia el Ayuntamiento.

Preferencias

Durante el encuentro, el abogado de los vecinos presentó un documento que recogía las razones que el colectivo argumentaba para rechazar la propuesta consistorial. Por otro lado, el letrado también adjuntó un texto en el que los vecinos expresaban sus limitaciones con respecto a las actuaciones en la zona.

La Gerencia se comprometió a estudiar las propuestas de los afectados y para ello ha solicitado al colectivo vecinal un documento más detallado que especifique las zonas concretas que quieren que se mantengan y las que quieren que se rehabiliten. Para facilitar la tarea al grupo, Urbanismo les ha suministrado dos planos de la barriada para que puedan delimitar sobre el papel sus preferencias. Rodríguez ha emplazado a los vecinos a una nueva reunión el próximo día 23 para la entrega de dicho escrito.

El presidente de la Asociación de Vecinos de Gallineras, Manuel Martínez, aseguró que la regeneración urbanística de la barriada era algo deseado por todos los afectados, ya que existen áreas concretas de viviendas que están muy deterioradas. Aunque por otro lado, Martínez aseveró que estas actuaciones han de ser ejecutadas con mucha delicadeza al existir terrenos donde los vecinos no estiman necesidad alguna de acciones. «Esto siempre ha sido un barrio tradicional y no queremos que pierda sus señas de identidad», detalló el presidente.

Martínez también mantiene que los inmuebles que no puedan evitar ser derribados deberían dar lugar a la habilitación de zonas comunes y no a nuevas viviendas.

Por su parte, el delegado de Urbanismo afirmó que la Gerencia no perseguía sólo mejorar la imagen de la zona, sino también solucionar los problemas causados por el hecho de que la mayoría de las viviendas se hayan construido al margen de cualquier planificación urbanística.