Castilla-La Mancha y Madrid firman un convenio sanitario durante cinco años

El acuerdo contempla que los ciudadanos del norte de Toledo puedan elegir hospital en Parla o Aranjuez y los guadalajareños recibir tratamiento de especialidades que no existen en la provincia

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El convenio sanitario entre la Comunidad de Madrid y Castilla-La Mancha por fin se ha hecho efectivo. Un acuerdo, con vigencia durante los próximos cinco años, que viene a legalizar la situación que se daba en la práctica desde hacía años y que se paralizó tras la entrada de María Dolores de Cospedal al Gobierno regional. La presidenta de Castilla-La Mancha enfatizó en la necesidad de reglar este hecho, al igual que se llevó a cabo con la comunidad autónoma de Aragón y los ciudadanos de la comarca de Molina.

Así, tras «duros meses de negociación», los consejeros de Sanidad de Castilla-La Mancha y de la Comunidad de Madrid, José Ignacio Echániz y Javier Rodríguez, han llegado este viernes a un acuerdo para prestar atención sanitaria especializada a ciudadanos de la provincia de Guadalajara y del norte de Toledo.

El convenio recoge que los más de 120.000 ciudadanos de pueblos del norte de Toledo como Esquivias, Noblejas, Ocaña, Seseña, Yepes, Illescas y Valmojado podrán elegir ser atendidos en cualquier especialidad en los hospitales Infanta Cristina de Parla o del Tajo, en Aranjuez. En el caso de los pacientes que acudan a alguno de estos hospitales madrileños se abonará mensualmente el 95 por ciento del valor de la cápita, realizándose después una liquidación en el año siguiente que deberá contener el pago del 5 por ciento restante de la cápita y cualquier otro coste que haya sido asumido por la Comunidad de Madrid y no esté incluido en la cápita.

Por su parte, los ciudadanos de la provincia de Guadalajara recibirán atención en los Hospitales Ramón y Cajal, La Paz y Puerta de Hierro-Majadahonda en aquellos servicios que no pueda prestar el Hospital Universitario de Guadalajara en las especialidades de Neurocirugía, Cirugía Cardíaca, Cirugía Pediátrica, Pediatría y sus especialidades, Neonatología, Medicina Nuclear y Cirugía Torácica. En este caso el pago se fijará por actividad, estableciéndose como precio de referencia el que recoge la normativa estatal relativa al Fondo de Cohesión, mientras que para los procesos no recogidos en la misma se establecerá un precio que acordarán ambas administraciones.

El acuerdo también prevé que los fármacos de dispensación hospitalaria prescritos por los médicos madrileños serán dispensados en los hospitales de Castilla-La Mancha. Los ciudadanos de Castilla-La Mancha que reciban atención sanitaria en la Comunidad de Madrid obtendrán una tarjeta sanitaria individual específica que garantizará su correcta identificación.

El consejero de Sanidad y Asuntos Sociales, José Ignacio Echániz, ha celebrado la firma del convenio sanitario con la Comunidad de Madrid porque supone «un hecho histórico» y ha asegurado que es un acuerdo «muy satisfactorio» para los intereses de los pacientes de Castilla-La Mancha.

El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Javier Rodríguez, ha señalado que la región está «encantada de poder seguir colaborando con Castilla-La Mancha, al igual que lo hace con el resto de las comunidades autónomas, como se demuestra con el reciente caso de la cooperante navarra trasladada desde Mali, y ofrecer así la mejor atención sanitaria».

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