Asamblea organizada por los ganaderos
Asamblea organizada por los ganaderos - efe

Bloqueo total de los ganaderos a las industrias para impedir el reparto de leche en Galicia

Feijóo asegura, tras la reunión a tres bandas, que «no hay nada que se les dé a los franceses que se le niegue a los gallegos», en alusión al borrador

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Lejos de aproximar posturas, los ganaderos que desde hace una semana se manifiestan en las calles de Lugo y Santiago han decidido recrudecer las medidas de presión para conseguir un acuerdo «que blinde un precio justo para la leche». De ahí que, desde ayer por la tarde, los tractores que ocupaban las principales arterias de comunicación de estas ciudades hayan puesto rumbo hacia las industrias. El objetivo —según explicó un representante de la Organización de Productores Lácteos (OPL) a este diario— es «bloquear» el reparto de leche en toda Galicia. Para lograrlo, los productores disconformes con el acuerdo planteado por el Ministerio se organizarán por ayuntamientos, trasladando los tractores a las sedes industriales más cercanas a la localización de sus granjas, caso de Lactalis en Vilalba o Larsa en Vilagarcía.

Sobre las repercuciones que este bloqueo podría tener en los consumidores, los productores piden disculpas y asumen que se trata de «daños colaterales».

«No vamos a dejar salir un solo producto lácteo», amenazan ante la falta de acuerdo tras la reunión mantenida ayer con Xunta e Industria. Muy beligerantes con las propuestas que están sobre la mesa —y que incluyen un compromiso de precios sostenibles y plasmar el origen de la leche—, los ganaderos hablan de «papel mojado» y piden «más garantías». En el otro extremo, la industria califica la propuesta ministerial de «hito» y asegura que aportará la estabilidad que el sector necesita. Así lo manifestó en declaraciones a ABC el director general de Feiraco, José Luis Antuña, que después de tres horas de reunión aclaró que «lo que no se puede es crear expectativas que son absolutamente ilegales», en referencia a la fijación por escrito de un precio mínimo para el litro de leche.

Convencido de que el borrador de Agricultura permitiría recuperar el precio de la leche «de forma rápida», el presidente de la Xunta también reiteró a los productores que minusvaloran el acuerdo que éste recoge «todo aquello que legalmente se puede poner». Como ejemplo, Alberto Núñez Feijóo equiparó este documento con el firmado en Francia y sentenció que «no hay nada que se le dé a los productores franceses que se les niegue a los gallegos». El texto de la discordia impedirá que las superficies usen el precio de la leche como reclamo, pero los ganaderos no lo ven claro y piden sanciones para quienes incumplan el acuerdo. Hasta que no lo logren, aseguran, mantendrán «sine die» unas movilizaciones que ya pasan factura a las áreas de venta. En algunos supermercados de la capital gallega es imposible encontrar pescado desde hace dos días. Tampoco carne ni productos frescos. A las estanterías vacías se unen ahora, además, los problemas de los franquiciados de marcas como Dia, a los que la compañía ha tenido que financiar con 1,5 millones para actualizar el stock de sus tiendas «seriamente mermado y dañado por el bloqueo».

«Ni una sola gota de leche»

El endurecimiento de las acciones anunciado por los productores provocó que, a última hora de ayer, el sindicato Asaja se desvinculase de estas medidas. Entre tanto, los ganaderos marchaban ya, al cierre de esta edición, camino de las quince industrias neurálgicas de la Comunidad con un objetivo claro: «Que no entre ni salga ni una sola gota de leche en Galicia». La intensificación del boicot a la industria repercutirá en el tráfico de las ciudades cercadas por los manifestantes, que con la marcha de los tractores empezó a relajarse. Aún así, se mantendrá el cerco al edificio de la Xunta en San Caetano y a grandes áreas comerciales como «As Cancelas».

No ejercer la violencia

Adelantándose a las consecuencias que su decisión conllevará, los productores aprovecharon la última asamblea de ayer para dejar claro que su bloqueo a las centrales lecheras provocará una huelga de entregas de facto en Galicia. «Como represalia, las industria dejarán de recoger la leche», manifestaron. Ante esta previsible situación, la plataforma llama a actuar con responsabilidad, no ejercer la violencia y no tirar la leche.

Ver los comentarios