El «caso de las microdepuradoras» de la Diputación de Orense, archivado

El juez Antonio Piña, instructor del «caso de las microdepuradoras de Orense», un total de 100 cuyo proceso de licitación se había cuestionado, discrepa de las supuestas irregularidades alertadas por la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF) que derivaron en una denuncia de BNG y PSdeG, por lo que archiva la causa.

Así lo confirma un auto del magistrado fechado el pasado 9 de diciembre, en el que señala en su parte dispositiva que acuerda el «sobreseimiento libre y archivo de las actuaciones en cuanto al procedimiento de licitación y adjudicación de las plantas depuradoras incluidas en los proyectos de Daredo y Deputrans». Mantiene abiertas «como diligencias previas en orden a la averiguación de si concurre ílicito penal en la adjudicación de las asistencia técnicas realizas a la empresa Netglobal el 27 de enero de 2004».

Argumenta Piña, que no todas las supuestas irregularidades que recoge la denuncia «tienen encaje penal, siendo alguna carente de relevancia a tales efectos». En cuanto a la posible predeterminación del concurso en favor de una empresa determinada, alega el juez que ya en su día un perito afirmó que «las características técnicas exigidas, en cuanto a materiales y configuración de las depuradoras, lo eran de mercado». De este modo, y a la vista del resultado comparativo del cumplimiento de las empresas concurrentes, señala que «no se aprecian circunstacias que hagan presumir una predeterminación de las mismas a favor de una empresa en concreto».

Por otro lado, en cuanto a las asistencias técnicas el instructor considera éste un aspecto que aún «no está lo suficientemente aclarado» y antes de proceder a su cierre ve necesario «tomar declaración a quien en la fecha de los hechos prestaba sus servicios a Netglobal».