Jugando a ser libreros

¿Qué hace un librero? ¿Cuántos libros hay en una librería? ¿Cómo se organizan? Estas son algunas de las preguntas que los escolares burgaleses realizaron a sus libreros durante la Feria del Libro. Catorce librerías de la ciudad abrieron sus puertas a los más pequeños que descubrieron los secretos de estos espacios llenos de aventuras y jugaron a ser libreros por un día.

Las librerías burgalesas se quedaron pequeñas durante la Feria del Libro para acoger la visita de los alumnos de Primaria que las llenaron de risas, preguntas y curiosidad. Por primera vez, la Asociación Provincial de Libreros decidió este año cerrar las casetas de la feria por las mañana y abrir sus librerías a esta actividad escolar que su presidente, Álvaro Mánso, califica como un «éxito rotundo» y tiene claro que tendrá continuidad en el futuro.

Álvaro es la tercera generación de libreros que está al frente de «Luz y Vida», un céntrico establecimiento con 67 años de historia que tiene en sus estanterías unos 15.000 libros. Esa fue una de las curiosidades que quiso saber uno de los niños de segundo de Primaria del Colegio Río Arlanzón.

Los niños hacían sus cálculos mientras miraban las altas estanterías de la librería y escuchaban con atención las diferencias entre bibliotecarios y libreros, que no es lo mismo prestar que vender, algo que ya hacían los romanos.

Hay quien visita por primera vez una librería y muestra su sorpresa mientras bucea en este bosque de libros que llegan hasta el techo, donde se pierde la vista. Otros aprovechan la ocasión para contar eso de «Yo ya he estado aquí, vengo con mi abuelo a comprar libros» y entonces es Álvaro quien no puede evitar la sonrisa pensando que, junto a las tres generaciones de libreros hay otras tantas de lectores y con los niños se tiene garantizado el futuro.

En el marco de esta visita hubo tiempo para las preguntas, para las historias y para jugar a ser libreros por un día. «¿Sabes dónde está cada libro?». Y ahí llega el quid de la cuestión, la organización por géneros que está llena de descubrimientos. Poesía, cuentos...

«-¿Sabéis qué es la novela negra?

-La de amor.

-Nooo».

Y entre risas llega el momento cambiar los papeles. Mientras algunos clientes no dudan en quedarse apoyados en el mostrador siguiendo la actividad escolar, Álvaro se convierte en visitante de su propia librería y va pidiendo a los niños, organizados por grupos, que encuentren tal o cual libro.

Aunque la explicación ha sido breve y rápida, está claro que los niños no han perdido detalle y la mayoría vuelan por la librería para encontrar rápidamente los libros solicitados y, de paso, buscar sus propias preferencias. Libros de cuentos pero también influenciados por los éxitos televisivos, por ejemplo, de los programas de cocina.

Igual que en «Luz y Vida», un total de catorce librerías burgalesas han participado en esta experiencia piloto durante la Feria del Libro que, sin duda, tendrá continuidad. Álvaro Manso explica que la participación de los niños ha sido «magnífica» y tanto libreros como profesores han acabado encantados con la iniciativa.

Como un viaje en globo

El tiempo se ha pasado volando y más de uno se va de «Luz y Vida» soñando con ser librero. Sobre el mostrador le quedan a Álvaro los dibujos en los que los pequeños recogen detalles de lo que han aprendido, lo que más les ha gustado de su librería o ese globo que vuela con las páginas de un libro que ha sido la imagen este año de la Feria del Libro donde los más pequeños han tenido un lugar especial.

Ellos se llevan un montón de conocimientos y curiosidades aprendidas entre libros y una historia, el cuento «El viaje» creado específicamente para la Feria del Libro y leído entre todos: «La imaginación es invisible y perezosa. Cuando viaja siempre prefiere el acogedor y cálido interior de un libro...»