Tudanca: «La sociedad no quiere mayorías absolutas; es difícil que alguna institución las consiga»

Le «abordamos» en una parada para comer en Tordesillas (Valladolid), donde comparte mesa y mantel con un nutrido equipo de socialistas de Valladolid. Eso sí, pagan a escote. La campaña no altera su carácter sereno, aunque ya muestra síntomas de fatiga. Nos sentamos en un patio tranquilo, con rosas al fondo, y conversamos con el socialista que ansía a gobernar Castilla y León tras 28 años de gobiernos del Partido Popular.

-¿Ha conseguido estos días captar algún voto indeciso o perdido?

-Soy de los que piensa que el PSOE siempre se crece en las campañas electorales, con el contacto directo con la gente. El ambiente que estamos viendo es de simpatía. Yo creo que nos está yendo bien la campaña.

Es más, estoy por pedir una prórroga para hacer una semana más porque nos viene bien que nos miren a los ojos y que escuchen nuestras propuestas.

-¿Intuye resultados?

-Yo creo que el PSOE está aprovechando bien la campaña. Yo sí que veo que la gente ve esa oportunidad del día 24.

-El PSOE ha optado por actos pequeños. ¿Miedo a no llenar?

-No. Hemos hecho actos grandes en Valladolid y León, pero hemos querido también que tuviera la oportunidad de hablar gente a la que no se le suele poner un micrófono delante ni en campaña ni fuera de campaña. Que esto no fuera una campaña de políticos hablando de otros políticos sino de gente hablando de Castilla y León.

-Ha compartido mitin con Pedro Sánchez y Zapatero, ¿quién suma más?

-En este partido todos suman. El partido se ha volcado en Castilla y León y eso también es fruto de esa expectativa. Éste es un partido que ha cometido errores porque ha gobernado mucho, pero también ha gobernado bien. Los gobiernos de 2004 y 2011 van a ser irrepetibles para Castilla y León. Nunca antes, y será muy difícil que después, ha habido tantas inversiones y proyectos.

-La corrupción está centrando su campaña. ¿Cree que el PSOE puede presumir de tener las manos completamente limpias?

-Nosotros partimos de lo que es un símbolo para la política en toda España como es Demetrio Madrid. También la senadora por Salamanca, Elena Diego, que dio todo un ejemplo renunciando a su escaño y luego fue también declarada inocente. No tenemos mochilas, no tenemos más que ejemplos. No llevamos ni un solo imputado en las listas. Nos hemos regenerado. El PP en Castilla y León ha tenido a sus últimos cinco vicepresidentes condenados, encausados o implicados en casos de corrupción gravísimos. La trama Gürtel, Púnica, eólica, solar, la Ciudad del medio Ambiente, el polígono de Portillo, el edificio de Arroyo... Ante eso no hemos tenido más que silencio, veto a comisiones de investigación y un presidente escondido.

-¿Y en Andalucía?

-La diferencia es cómo reaccionamos. En Andalucía el PSOE no ha presentado un solo imputado en sus listas autonómicas. En Castilla y León el PP presenta al señor Maillo, imputado; a De la Riva, que se ha sentado en un banquillo; al presidente de la Diputación de Ávila, que está imputado...

-Herrera le ha avisado que está rompiendo puentes de cara a una futura relación política e institucional. ¿Le preocupa?

-En absoluto. Yo en política no tengo adversarios, ni enemigos. Mi adversario son las políticas que ha llevado a cabo el PP que han hecho muchísimo daño a esta tierra y la han despoblado, le han robado su futuro. Mis puentes, mis acuerdos y compromisos son los castellano y leoneses. No con el PP ni con el señor Herrera, que no me va a decir ni de qué tengo que hablar ni cómo lo tengo que decir ni dónde. Si no ha entendido la necesidad de limpiar la política y regenerarla, el problema lo tiene él, no yo.

-Se ha echado en falta a Óscar López y Julio Villarrubia estos días.

-Todos han estado echando una mano. No nos sobran manos en el PSOE para trabajar ni cabezas para pensar y yo a todos les he pedido ayuda, consejo, trabajo y todos lo están haciendo. Cada uno tiene su papel.

-¿Rascar algo de los votantes «avergonzados» del PP suena a desesperación?

-No. Yo lo que digo es que quiero el voto de los progresistas de esta Comunidad, pero sé también que hay muchas personas votantes del PP que están cabreados y avergonzadas del comportamiento de sus dirigentes con la corrupción y la ineficacia de sus dirigentes. A ellos también me quiero dirigir porque estoy convencido de que hay muchos votantes del PP que quieren que las cosas cambien.

-Del PP al PSOE, ¿no es un voto contra natura?

-Puede ser así si consideramos que el voto es de alguien, pero el voto no es de nadie, es libre y la gente puede ver que nuestro proyecto es de futuro. Si ven en nosotros un grupo de gente honesta con toda la humildad, pero también la ilusión y la ambición... ¿por qué no?

-El candidato a la Alcaldía de Soria dice que hay que ser un supermán para dar un vuelco electoral en Castilla y León.

-Soy muy tenaz y no me rindo nunca. Yo veo esa oportunidad. Esta Comunidad no es ni de derechas ni de izquierdas. El PSOE ha tenido niveles de voto del 42% en Castilla y León. No es difícil. El PSOE tiene mucho más detrás que una cara o un nombre, por eso es posible.

-¿No cree que ésta es la Comunidad más difícil para el PSOE?

-A ese mito le quedan tres días.

-¿Qué es más fácil ganar por mayoría o gobernar en coalición?

-No se trata de aritmética, de lograr una suma sino de poder darle un gobierno estable a Castilla y León, pero más que con quién pactar se trata de para qué pactar. El PP está en ese argumento tramposo de que la mayoría absoluta es lo único que garantiza la estabilidad y el cumplimiento de los programas. ¡Por favor! No han cumplido uno solo de los compromisos de los últimos cuatro años. A mí no me da miedo enfrentarme a un parlamento más plural porque eso es la política. Sí me parece que para enfrentarse a eso hace falta entender la política no como un rodillo. Quiero ser capaz de convencer a la mayoría y de establecer consensos. Lo que sí parece un mensaje claro de los ciudadanos es que no quieren mayorías absolutas y que van a ser difícilmente alcanzables en cualquier institución. Estamos en un tiempo nuevo que requiere una nueva forma de hacer política que sea capaz de esos entendimientos.

-¿Con quién sí y con quién no?

-Yo voy a hablar con todos los partidos que tengan representación parlamentario porque estarán allí porque la gente lo ha querido y les ha votado. Lo que nunca voy a hacer es un gobierno con aquellos que les considero responsables de a dónde han llevado a esta Comunidad. Nunca voy ha hacer un pacto de Gobierno con el PP. Me importa más para quién que con quién.

-Si el PP pierde la mayoría absoluta, ¿sería un buen resultado para el PSOE?

-No. Yo aspiro a ganar y a gobernar. No puede haber otro objetivo que tener un gobierno socialista con una mayoría suficiente.

-¿Cree que su partido parte en desventaja después de haber estado meses enrocado en sus problemas internos?

-Lo resolvimos de la mejor manera posible que es con el mayor ejercicio de democracia que haya hecho partido alguno. Luego es verdad que hablan del conocimiento, que solo he tenido ocho meses para darme a conocer.

-¿Eso es un handicap?

-La gente está pidiendo caras nuevas en la política. La opción es alguien que lleva 30 años en cargos públicos o alguien nuevo. El nuevo será menos conocido, al menos al principio, pero en sólo ocho meses hemos logrado dar a conocer mucho y bien un nuevo proyecto político para el PSOE y para Castilla y León. A Herrera le conocen más que a mí por haberse cargado la minería, por haber privatizado un hospital, por haber despoblado la Comunidad...

-Según sus encuestas, ¿cuántos procuradores espera conseguir?

-Esto no va de apuestas.

-¿Un suelo y un techo?

-La teoría de los suelos electorales hace tiempo que saltó por los aires. Sí que creo que hay un cambio en el ambiente fruto de la necesidad de que las cosas cambien.

-¿Dejaría de liderar el partido si el resultado es malo?

-Tengo claro que quienes me eligieron democráticamente, porque pensaron que podía liderar el PSOE, me pondrán donde ellos quieran.

-En el ámbito municipal, ¿qué plazas son más seguras y cuáles más complicadas?

-Yo estoy convencido de que no habrá una sola capital de provincia en esta comunidad que tenga una mayoría absoluta. Probablemente las que andan más cerca son Soria y Segovia, gobernadas por el PSOE. Va a ser muy difícil alcanzar mayorías absolutas por esta fragmentación, aunque creo que en Soria y Segovia lo tenemos al alcance de la mano. En el resto, el PP ha cometido errores muy serios y los tiene muy difícil. En Valladolid porque han presentado a alguien que se ha sentado en el banquillo, en León a alguien que encabeza la lista a las Cortes, lo cual es un signo de nerviosismo, de querer asegurar un cargo. Tenemos candidatos buenos y renovados.

-¿De verdad piensa que la Comunidad está tan mal como dice o son argumentos propios de la campaña electoral?

-Esta es una gran Comunidad con un potencial increíble. Me frustra que teniendo todo, dejemos pasar las oportunidades. No sé si es un mal cuadro pero no lo he pintado yo, lo está pintando el PP.

-¿No se cree, entonces, los informes económicos o los del Pisa en los que la región sale bien parada?

-Yo lo que comparo es la vida real con ese país de Oz en el que vive el Partido Popular.