Empleados de los Galán pidieron la reapertura. :: ANTONIO VÁZQUEZ
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Turismo ya alertó a los ayuntamientos de que los Galán no regentaban hoteles

La Junta ha retirado del registro oficial 18 clubes, como el conocido Don Tico, que siguen funcionando gracias a las licencias municipales

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Faltaba por conocer la posición de la Junta en cuanto al uso de licencias hoteleras que amparan negocios que nada tienen que ver con el hospedaje y sí con el sexo pagado; caso de los locales que ha levantado la familia Galán. La sorpresa llegó de manos del delegado provincial de Turismo, José María Reguera, al dar a conocer a este medio el trabajo de inspección que está realizando su departamento desde el año pasado cuando se decidió descalificar todos los establecimientos que no son hoteles al uso. El primer resultado ha sido la eliminación de 18 clubes gaditanos del Registro de Turismo de Andalucía, entre ellos, cuatro de los locales que regentan los Galán. Pero no son los únicos, ya hay en trámite otros tres expedientes y la vocación de Turismo es mantener la etiqueta de hotel sólo para los negocios que abren con ese fin.

Cualquier establecimiento hotelero que funcione en la comunidad debe de estar dado de alto en el citado registro. Si no está en él, como indica Reguera, no existe para la Administración y por tanto está fuera del reglamento que rige el sector y tampoco sus empresarios pueden acceder a ningún tipo de incentivo.

La resolución administrativa que descalificaba estos clubes se produjo en julio del año pasado y se dio parte a los distintos ayuntamientos para que obraran en consecuencia. «Se puede dar el caso de que algunos de estos locales estén ocupando suelo de uso hotelero, cuando en realidad están contraviniendo esa norma porque no tienen tal categoría», decía ayer Reguera. Sin embargo, la decisión de revocar esas licencias compete a los ayuntamientos que son los que las otorgan. Este periódico testó el pasado martes y así informó en su edición de ayer cuál era el sentir de los seis consistorios en donde están ubicados los negocios de los Galán. Salvo el alcalde de Estepona, que anunció que analizaría el estado de la licencia del club Aladín, el resto se desentendió de esa labor de control; pese a que la jueza instructora del 'caso Toscana' les ha remitido un oficio en donde les informa que esos establecimientos que operan en sus términos municipales se amparan en licencias hoteleras para camuflar su actividad lucrativa a través de la prostitución. Incluso desde ayuntamientos como el de El Puerto o Los Barrios se trasladaba la cuestión a la Junta, como último garante del funcionamiento de los hoteles. Y aunque Turismo ya ha hecho ese trabajo, los citados clubes siguen operando bajo licencias de hoteles cuando la Junta no los reconoce como tal.

Clientes como huéspedes

De los 18 primeros clubes que han sido borrados del registro, siete recurrieron la resolución administrativa entre ellos los cuatro clubes de los Galán que están ahora fuera del reglamento hotelero. Fuentes de la investigación confirmaron a este medio que por el mes de julio, la Guardia Civil detectó cómo en La Hacienda y otros locales de los imputados comenzaron a remitirse fichas de hospedajes de clientes como si se alojaran en los establecimientos cuando en realidad sólo acudían para contratar los servicios sexuales de las prostitutas.