El presidente Erdogan, en una imagen de archivo
El presidente Erdogan, en una imagen de archivo

Turquía extenderá otros tres meses el estado de emergencia

El Primer Ministro ha anunciado que el período extraordinario del país eurasiático se ampliará por tercera vez

CORRESPONSAL EN ESTAMBUL Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La normalidad está lejos de regresar a Turquía. El primer ministro Binali Yildirim ha anunciado la intención del Gobierno de extender el marco legal extraordinario en el que vive el país desde el pasado mes de julio. «El estado de emergencia continuará durante un poco más», ha señalado ante un grupo de periodistas en la capital Ankara.

El pasado mes de enero fue la última vez que el Parlamento extendió el estado de emergencia, que en estos momentos expira el próximo 19 de abril, solo tres días después de que se celebre el referéndum que podría aumentar los poderes ejecutivos del presidente Recep Tayyip Erdogan.

A pesar de las palabras de Yildirim, esta es una medida que tiene que ser aprobada por mayoría parlamentaria.

No obstante, para recabar los votos necesarios el partido islamista y gobernante del AKP (Partido de la Justicia y el Desarrollo) solo requiere el apoyo del ultraderechista MHP (Partido de Acción Nacionalista), fuerza política con la que ya aprobó las anteriores extensiones del estado de emergencia, así como la convocatoria del referéndum.

De llevar a cabo las intenciones expresadas por el primer ministro, el período extraordinario finalizaría el próximo 20 de julio, es decir, cinco jornadas después del primer aniversario del fallido golpe de Estado y casi 365 días desde que se aprobó por primera vez. La traumática noche del 15 de julio, en la que soldados sublevados mataron a cerca de 240 personas, fue el motivo por el que se aprobó por primera vez.

Con el estado de emergencia se suspende temporalmente el marco legal habitual y el Gobierno obtiene mayores poderes, como la posibilidad de dictar decretos ejecutivos con más facilidad o hacer registros sin autorización judicial. Desde el islamista AKP aseguran que es una medida necesaria debido a las «amenazas» que sufre el país. Sin embargo, las principales formaciones políticas de la oposición, el socialdemócrata CHP (Partido Republicano del Pueblo) y el prokurdo HDP (Partido Democrático del Pueblo), han mostrado en repetidas ocasiones su rechazo alegando que así se limitan los derechos fundamentales de los ciudadanos.

Purgas

Las purgas promovidas por Erdogan se sitúan dentro del marco del estado de emergencia. Cerca de 40.000 personas han sido arrestadas y más de 100.000 funcionarios han sido despedidos o suspendidos de empleo, muchos acusados de tener vínculos con el movimiento de Fetulá Gülen, el clérigo residente en Estados Unidos al que Ankara culpa de orquestar el levantamiento militar.

Pero a pesar de todas las medidas extraordinarias, no se ha conseguido poner fin a la espiral de violencia en la que vive el país. Además de los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y milicias vinculadas al PKK (Partido de los Trabajadores del Kurdistán) en las provincias del sudeste de Turquía, se han producido repetidas masacres en ciudades tan importantes como Estambul. Grupos insurgentes kurdos y los yihadistas de Daesh o autodenominado Estado Islámico han protagonizado estos ataques.

Ver los comentarios