Secuestrada y violada a diario durante dos meses por un asesino en serie

Se encontraba en un contenedor gigante de una granja de Carolina del Sur, en Estados Unidos. En noviembre del año pasado, Kala Brown, de 30 años, desapareció junto a su novio Charlie sin dejar rastro. Allí permaneció desde entonces, en aquel agujero sin luz ni ventilación, con algo de comida y unos pocos de libros.

Su captor, Todd Kohlhepp, un asesino en serie de 46 años, estuvo durante meses violándola prácticamente a diario, sin que nadie la encontrara.

Uno de los días de aquel infierno, los gritos desesperados de Brown fueron escuchados por unos agentes de Policía. Tras varias horas de trabajos, fueron capaces de abrir las puertas del contenedor, donde se encontraron con una escena macabra: la joven se encontraba atada como un animal, con una cadena rodeándola el cuello y sellada con un candado.

Las dramáticas imágenes de su liberación se han hecho públicas ahora, pero lo cierto es que el rescate ocurrió en noviembre del año pasado.

El asesino en serie se ha declarado culpable de acabar con la vida de, al menos, siete personas, con el objetivo de evitar la pena de muerte. El juez le ha condenado a cadena perpetua.