Los candidatos participantes, en un momento del debate televisado
Los candidatos participantes, en un momento del debate televisado - afp

El primer debate presidencial de la historia argentina pone en evidencia al candidato de Kirchner

La ausencia de Daniel Scioli le granjea ásperas críticas del resto de candidatos

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Argentina celebró el primer debate presidencial de la historia sin la participación del candidato favorito, el oficialista Daniel Scioli. La ausencia del todavía gobernador de la provincia de Buenos Aires fue blanco de críticas de los otros candidatos. Falta de respeto, burla a la democracia, fantasma y expresiones de similar tono fueron las más fuertes en un encuentro marcado por las buenas formas y la cordialidad. No obstante, Aníbal Fernández, jefe de Gabinete de Cristina Fernández de Kirchner, lo calificó de «paupérrimo» y «show vacío de propuestas». Ni la televisión pública ni el resto de las privadas, salvo el Canal América, lo transmitieron.

Con el atril vació del hombre que representa los intereses del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner el pulso más interesante, entre los cinco candidatos, se celebró entre el liberal Mauricio Macri de la coalición Cambiemos y segundo en los sondeos y Sergio Massa, tercero en las preferencias del electorado, ex jefe de Gabinete del Gobierno, peronista como Scioli y candidato de Unidos por una Nueva Argentina, alianza que parece resurgir de sus cenizas con una tendencia ascendente en las últimas semanas.

En rigor hubo pocas sorpresa en un debate de formato amable, sin aplausos, con preguntas entre los candidatos determinadas por sorteo, sin réplicas o repreguntas de los maestros de ceremonias (no hizo falta moderar nada) y con exposiciones temáticas en bloques cerrados.

Macri, más suelto

Mauricio Macri logró romper el corsé que le oprime en sus intervenciones en público aunque aún está lejos de ofrecer una imagen de candidato con dotes de oratoria naturales y convincente. Era el que corría mayor riesgo, el que tenía más que perder y, por fortuna para él, salió airoso. «Pobreza cero y educación pública de calidad» fueron algunos de los títulos que ofreció. Sobre Scioli dijo: «Lamento que no esté acá, se ve que en el Frente para la Victoria (partido del Gobierno) están con dificultades para ver quién gobierna (si ganaran las elecciones) si Cristina, Carlos Zannini (candidato a vicepresidente), Aníbal Fernández (jefe de Gabinete) o quién. ¿Cómo van a hacer para gobernar con ese nivel de contradicción», dijo en alusión a que Scioli sería un títere del kirchenrismo duro.

Massa propuso «un régimen penal juvenil nacional», combate sin tregua al narcotráfico y reinstaurar la pena de muerte. Además le recordó a Macri, en el posiblemente único momento de cierta tensión, que estaba procesado en una causa judicial por intervenciones telefónicas ilegales y las empresas de su padre lograron variados contratados durante los sucesivos gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner. Eso, como preludio a una invitación, que Macri aceptó, de suscribir un pacto de lucha contra la corrupción.

Los otros candidatos que participaron fueron, el ex presidente peronista Alberto Rodríguez Saá; Margarita Stolbizer, ex miembro de la Unión Cívica Radical, con un discurso consistente y responsable de que la justicia investigue la gestión fraudulenta de sociedades de la Presidenta y su posible lavado de dinero; y Nicolás del Caño, el joven revelación del Frente de Izquierda, modelo Pablo Iglesias pero con formas más elegantes.

Del Caño, en varias de sus intervenciones puso a Cuba como ejemplo: «Es el país con menor mortalidad infantil de América junto con Canadá», celebró mientras Rodríguez Saá repetía que «en Argentina hay doce millones de pobres» y denunciaba el fraude electoral en provincias como Tucumán. La pobreza es un misterio en Argentina ya que el Gobierno oculta esas estadísticas.

Stolbizer recordó que muere «una mujer cada 30 horas en Argentina por violencia de género» y lamentó competir con «candidatos a los que no les cierran las cuentas... Ninguna democracia es una democracia completa cuando está manchada por la corrupción».

Los primeras encuestas en las ediciones digitales de los periódicos alternaban a Mauricio Macri y a Sergio Massa en el primero y segundo puesto como los más convincentes. Dicho esto, este tipo de debates no suele mover la tendencia de voto sensiblemente. En cuanto a los sondeos de intención de voto, el último de Polldata insiste en colocar a Daniel Scioli en cabeza con un 38,9 por ciento seguido de Macri, once puntos abajo. Este escenario forzaría una segunda vuelta después del 25 de este mes.

Ver los comentarios