Cinco advertencias para que ponerte lentillas de fantasía este Halloween no se convierta en tu pesadilla

Este año, se espera todos aquellos que disfrutan disfrazándose en Halloween presten algo más de atención a sus ojos para maquillarlos con mayor dedicación y transformarlos para hacerlos más terroríficos tras las mascarillas que este año deslucirán algo los disfraces de esta fecha tan señalada.

La mirada, por tanto, cobra protagonismo en este Halloween y para todos aquellos que opten por el uso de lentillas de fantasía para simular ser un verdadero vampiro, bruja o zombi, desde Alain Afflelou ofrecen una serie de claves para velar por la salud visualde la mano de especialistas:

— Lavarnos las manos tanto antes de manipularlas como antes de retirarlas. Es importante que las manos estén perfectamente limpias a la hora de manipular las lentillas, ya que cualquier microorganismo que entre en contacto con ellas puede estropearlas y ocasionar problemas en nuestros ojos.

—Colocarlas antes de maquillarte, para evitar tocarlas con las manos llenas de maquillaje. Es habitual que los disfraces de Halloween vayan acompañados por elaborados maquillajes, así que procura colocar las lentillas antes para que en ningún caso se ensucien y puedan causar una infección.

—Limpiarlas y guardarlas siempre con una solución específica para lentillas. Al igual que otras lentillas es importante que las guardes en soluciones indicadas para limpiarlas y conservarlas en perfecto estado, evitando así que puedan adherirse partículas o suciedad que luego pasen a nuestros ojos y que provoquen daños en nuestra vista.

— Prestar atención a las recomendaciones de uso del fabricante; es decir, no llevarlas puestas más del tiempo recomendado y, sobre todo, ¡nunca dormir con ellas puestas! Es fundamental seguir las especificaciones de cada fabricante para disfrutar de las lentillas sin ningún riesgo, así que respeta los tiempos máximos de uso marcados y no duermas nunca con ellas.

—Por último, y muy importante, recordar que este tipo de lentillas no son un juguete. Es importante comprarlas siempre en una óptica para que sean prescritas y adaptadas por un óptico-optometristas y así evitar cualquier tipo de problema de salud visual y disfrutar de ellas con la máxima seguridad.