Uno de cada 100 niños nacidos en España pesa menos de 1,5 Kg

En 2013, uno de cada 100 niños que nació en España pesó menos de 1,5 kg. Según los datos de la red neonatal SEN1500, a los dos años de edad corregida –es decir, descontando a los 24 meses los días que hayan nacido antes— cerca de la mitad de ellos tienen bajo peso. Asimismo, uno de cada cuatro tiene una talla baja o un perímetro cefálico pequeño, lo que se relaciona con problemas neurológicos. Estos son algunos de los resultados del estudio «Evolución a los 2 años de edad corregida de una cohorte de recién nacidos con peso inferior o igual a 1.500 gramos de los hospitales pertenecientes a la red neonatal SEN1500», al que la Asociación Española de Pediatría (AEP)

ha otorgado el Premio Jerónimo Soriano en su última edición.

La Red Neonatal SEN1500, integrada por 59 hospitales de toda España, estudia la evolución de los niños prematuros de bajo peso a los dos años con el objetivo de analizar la situación de los diferentes hospitales españoles e introducir mejoras en la asistencia a estos niños y sus familias. En este estudio se hace una comparación entre dos grupos: los bebés con un peso inferior a 1.001 gramos y entre 1.001 y 1.500 gramos; y dentro de estos grupos se estratifica entre varones y mujeres. La investigación ha puesto de manifiesto que los niños que nacieron con menos de 1.001 g presentan un mayor número de deficiencias que los que pesaron entre 1.001-1.500 gramos.

Por sexos, también se han observado diferencias estadísticamente significativas, de forma que, a igual peso, en los varones hay mayor incidencia de déficit motor, parálisis cerebral y déficit auditivo, así como de problemas de comunicación y expresión. «Esto se debe a que las hormonas influyen en el desarrollo. Sin embargo, en el déficit visual no hubo diferencias entre sexos», señala la doctora Pilar García, coordinadora de la Red SEN1500.

Fruto de las investigaciones, así como de las mejoras asistenciales continuas en neonatología, «los resultados de morbi-mortalidad de los niños con bajo a peso al nacer son mejores, lo que repercutirá en un mejor futuro de estos niños», apunta la doctora García, a la vez que recuerda que «la supervivencia de los niños menores de 750 gramos, que tienen mayor riesgo de secuelas, es cada vez mayor y, sin embargo, no ha aumentado la morbilidad global, lo que significa que en algunas poblaciones ha disminuido. De hecho, en los bebés de más de 1.000 gramos se ha observado una menor incidencia de parálisis cerebral y una tendencia a disminuir la gravedad de la misma.