Cristiano Ronaldo y sus escapadas más ambiguas

La fiesta de Cristiano Ronaldo con sus amigos en el yate del millonario británico sir Phillip Green vuelve a disparar los comentarios de la prensa lusa sobre el supuesto lado gay de la megaestrella portuguesa. En las aguas de la Costa Azul, con Saint-Tropez y Montecarlo rendidos a sus pies, Cristiano se marcó unos bailes muy sexys con varios amigos, todos ellos chicos tan esculturales como él, al ritmo del clásico «YMCA» de Village People.

Así que aquí están de nuevo los rumores prestos a interpretar que no parece echar de menos a su ex novia Irina Shayk, a quien se ve muy contenta en brazos de Bradley Cooper.

El caso es que tampoco constituye ninguna sorpresa que se asocie al gran competidor de Messi con ambientes y situaciones homosexuales.

El año pasado ya se especuló con los gustos del jugador tras sus vacaciones en Mykonos, la isla griega erigida en paraíso gay internacional. Entonces aún se le relacionaba con la modelo rusa, pero ella no se encontraba allí, por lo que Ronaldo campaba a sus anchas con una cuadrilla masculina y el bronceado como meta diaria.

Hace cinco años, fue visto (y fotografiado) saliendo de un club gay neoyorquino en compañía de Lance Bass, ex componente del grupo NSync y homosexual declarado. Siempre que abandona la disciplina de la temporada futbolística, tanto en el Manchester United como en el Bernabéu, exhibe su inclinación a despendolarse durante el periodo de asueto, con modelos de diversión emparentados con los que reinan, por ejemplo, en Key West, el ‘resort’ gay de Florida.

Incluso se le señala por la sorprendente revelación de que tiene un hijo con una madre de alquiler encarnada en una supuesta camarera norteamericana. Y es que ese mismo método suele ser utilizado por famosos que salieron del armario, como Ricky Martin o Rufus Wainwright.

Las fotos actuales son más «comprometedoras», como ese momento en el que abraza a un muchacho de color. Los rumores están servidos en vísperas de la final de Champions League en Berlín entre la Juventus, verdugo del Real Madrid, y el Barcelona.