Se buscan voluntarios para la «policía comunitaria» de Carmena

La nueva « policía comunitaria» que quiere implantar Manuela Carmena en Madrid comenzará a funcionar a modo de proyecto piloto en enero de 2017 en el barrio de Lavapiés. Pero para ello hacen falta ocho agentes voluntarios que se presten a cambiar sus actuales funciones por las de policías de barrio. Deberán dejar los vehículos para patrullar a pie o en bicicleta y mantener así un estrecho contacto con los vecinos y el tejido asociativo.

Este martes, el delegado de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, y el director de la Policía Municipal, Andrés Serrano, junto al concejal de Centro, Jorge García Castaño, han avanzado en rueda de prensa las claves de este modelo, aún etéreo, que pretende «mejorar el prestigio» del Cuerpo, como ha indicado Serrano.

Tratan de huir de la «policía reactiva», ha añadido.

Supuestamente, estos agentes tendrán una función similar a la de los agentes tutores en los colegios, al de las Oficinas de Atención al Ciudadano o la policía de proximidad. Enseñarán, por ejemplo, a las personas mayores cómo autoprotegerse ante hurtos o estafas, mediarán ante el fenómeno del botellón, la okupación, la venta de drogas, inmigración, mujeres maltratadas... aunque todavía no están definidas las fórmulas.

No se reducirá la cifra de agentes en otras unidades. «Basta con quitar la escolta a cuatro concejales y ya se ha hecho», ha informado García Castaño. Como ha señalado Serrano, deberán tener «permanencia en el barrio, arraigo y motivación».

Ciudadano, papel fiscalizador

El ciudadano tendrá un papel estelar dentro de la policía comunitaria, el de «fiscalizador», como ha explicado Barbero: «Lo que va a poder ver el ciudadano es que es un sujeto activo en términos de seguridad, que su misión no es únicamente descolgar el teléfono y hacer un aviso o una denuncia, sino que también va a poder formular cómo deben ser las cosas en materia de seguridad y cuál es el compromiso que él quiere dar; además de ser cliente de una tienda o tendero de la misma, es un ciudadano que convive y que tiene que soportar determinadas infracciones que no tiene por qué soportar».

Miguel Ángel Gandanillas, director del Instituto Internacional de Innovación en Organización y Desarrollo Social (Indos), encargado de poner en marcha el plan, ha apuntado que este modelo sería capaz de prevenir incluso «actos de terrorismo». Este proyecto ya se ha implantado en países como Holanda y Estados Unidos. Está recomendado por organismos como la ONU, según ha dicho Gandanillas.

El objetivo de Ahora Madrid es, como contempla el Plan Director de Ahora Madrid, extender al resto de la ciudad la policía comunitaria.