Oltra se desmarca de las decisiones de la consellera de Sanidad y dirige hacia ella las explicaciones

No pocas veces la vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, ha tenido que salir a dar explicaciones sobre la gestión de la consellera de Sanidad, la socialista Carmen Montón. La mayoría por cuestiones polémicas que han generado malestar dentro del propio Gobierno valenciano.

Ocurrió con la contratación meses atrás de la hija de la secretaria autonómica de Sanidad, Dolores Salas, en la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunitat Valenciana (Fisabio), hecho por el que ésta tuvo que dimitir.

También con el nombramiento como gerente de Egevasa (dependiente de la Diputación de Valencia) del marido de Montón, puesto al que posteriormente renunció y cuyo fichaje Oltra calificó como «poco estético».

Otras desiganciones controvertidas fueron la de la senadora del PSC Mónica Almiñana como gerente del hospital La Fe de Valencia, además de una decena de cargos socialistas situados a dedo al frente de la sanidad púbica y pendientes de investigar en las Cortes.

Ahora ha vuelto a ocurrir con dos decisiones recientes de Montón. La primera, la colocación de un periodista y escritor al frente de la Dirección General de Gestión Sanitaria denunciada por el sindicato CSI·F.

El «silencio»

Oltra ha optado esta vez por un elocuente silencio de desmarque. «Yo no sé si su formación (en referencia al periodista) le permite estar capacitado para ese puesto, lo que sé es que con la información que tengo no puedo dar explicaciones. La consellera de Sanidad, que se explica muy bien, como dijo en las Cortes, podrá informar sobre ello», ha afirmado este viernes en la rueda de prensa del pleno sel Consell.

De la misma forma se ha pronunciado sobre que la Universidad Jaume I de Castellón no avale el Plan de Ordenación de Recursos Humanos para el Hospital Provincial de Castellón, elaborado por dos profesores de la institución académica y usado por la Conselleria de Sanidad para despedir a 20 personas. «Recabaremos la información y la facilitaremos. Si no, pueden dirigirse a la consellera de Sanidad que seguro que tiene todos los datos», ha aseverado Oltra.

Conocida es la escasa sintonía entre ambas dirigentes desde el inicio de la legislatura. Pero también las diferencias de Montón con el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, dentro del PSOE. Su posicionamiento hasta el final con el que fuera líder de los socialistas, Pedro Sánchez, pese a que el jefe del Consell firmó para forzar su caída, fue descrito por Puig como una «ruptura emocional». Las voces que sitúan a Montón más fuera que dentro del Gobierno valenciano van aumentando. Habrá que esperar, según parece, hasta la próxima reestructuración.