No nos soportamos

La verdad es que parecemos del PSOE. Que si Pedro me engañó. Pues mira que Felipe con lo de la OTAN tampoco se quedó atrás. No nos soportamos los unos a los otros. Este miércoles hemos conocido un estudio que dice que los valencianos nos divorciamos más que la media. Pero mucho más. Vamos, que de cada diez matrimonios, siete acaban en divorcio. No sé yo si habrá que ilegalizar el matrimonio a la vista del altísimo riesgo de fracaso….

Pero no se preocupe. No vamos a prohibir nada, porque si no tendremos que prohibirlo todo, absolutamente todo. Porque lo de no soportarnos no es una cuestión circunscrita al matrimonio. Que va. Ocurre también en las empresas. No nos aguantamos los unos a los otros.

Si tiene la suerte de tener trabajo, sabe de qué le estoy hablando. El trabajador que habla bien de la mayoría de sus compañeros es tan rara avis como el senador que se duerme en su primera sesión como miembro del grupo mixto.

¿Y en las familias? Pues algo más de lo mismo. En cuanto ponemos cuatro cuñados una suegra y un abuelo cebolleta en la mesa un domingo, y los acompañamos con tres adolescentes y dos bebés…. El sindiós está garantizado.

Igual si dimitimos todos….

Me da la sensación de que conforme avanza esta sociedad nos vamos haciendo más intolerantes los unos con los otros. Y eso se nota en las relaciones personales más próximas -las de pareja, las familiares, las laborales- y de forma inevitable trasciende también a otras relaciones más complejas, como las de la gran política o las de la sociedad civil en su conjunto.

Quién sabe, igual es el momento de adquirir un compromiso vital cada uno de nosotros para empezar a soportarnos un poco mejor. Compromiso. Suena bien… tal vez como un partido político nacional dispuesto a ocupar el espacio de la izquierda histórica devastada por la intolerancia.