Imagen de la tareas de derribo del edificio municipal
Imagen de la tareas de derribo del edificio municipal - EFE
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El edificio del Ayuntamiento levantado en 1987 dará paso a un hotel de veinte alturas

El equipo de gobierno reitera que el derribo fue aprobado en la anterior legislatura frente a las críticas de los vecinos

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De sede administrativa a hotel. Las tareas de derribo del edificio conocido como nuevo Ayuntamiento de Valencia, ubicado en la Avenida Aragón y que comenzaron la semana pasada, avanzan al ritmo que corresponde y podrían pasar cuatro meses hasta que la parcela, donde se construirá un hotel, quede totalmente limpia.

Así lo han indicado a EFE fuentes municipales, que han concretado que las tareas de derribo están valoradas en 470.000 euros y que el desescombro es "selectivo" ya que cada residuo, sea aluminio, ladrillo u otro material, se retira a donde corresponde.

El pasado sábado se derribó la fachada lateral del edificio que da al estadio de Mestalla, lo que obligó a cortar un carril de la avenida Aragón y, previamente los operarios han trabajado para, poco a poco, tirar por dentro el edificio.

En fechas por determinar está previsto derribar la fachada principal, lo que volverá a interrumpir parte del tráfico que pasa por la zona, y posteriormente, desmontar por arriba el edificio "para que no se caiga".

Las fuentes han explicado que este derribo forma parte de la permuta acordada por la anterior corporación local con los propietarios del solar de Jesuitas, con una edificabilidad de 16.000 metros cuadrados, donde se iba a construir el hotel y que finalmente ser hará en la parcela del nuevo ayuntamiento.

Desde diferentes organizaciones y asociaciones habían pedido que no se derribara el edificio, construido en 1987, para que fuera dedicado a usos públicos, pero según las fuentes municipales el convenio penalizaba con 18 millones de euros al consistorio si no cumplía con el derribo.

"Hemos tenido que cumplir un convenio heredado aunque la gente no lo entienda", han lamentado y han asegurado que el actual equipo de gobierno hubiera preferido mantener el edificio y buscar otro solar por la ciudad para la construcción del hotel pero no había "ningún resquicio legal" para negociar una nueva ubicación.

La superficie que ocupa el nuevo ayuntamiento es de menos de mil metros cuadrados, por lo para acoger los 16.000 metros de edificabilidad, el futuro hotel podría tener hasta veinte alturas.

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